Ines Schramm presentó ayer su primer libro sobre Eivissa.

La fotógrafa alemana afincada en Eivissa desde hace seis años Ines Schramm presentó ayer en el hotel Las Cicadas, junto a la carretera de Santa Gertrudis, su nuevo libro de fotografías Chiefs, Queens, brujas y una chica de San Juan.

En él se pueden contemplar a lo largo de 246 páginas las imágenes sobre gentes, paisajes y tradiciones de Eivissa que Schramm ha ido captando a lo largo de un intenso trabajo de campo que se ha prolongado durante dos años y medio. «Creo que Eivissa es el mejor lugar del mundo para vivir y por lo mucho que me ha dado tanto a mí como a mi familia creo que le debía hacer un trabajo tan intenso y especial como este», aseguró la autora.

Las fotografías están divididas en ocho capítulos - Cala Nova, Laundry, Matanza, Chiefs & Queens, Margalida, Dones i Homes, House of Light y The Forgotten - muy diferentes entre sí pero con elementos comunes como la calidad y lo impactante de las imágenes. «En los últimos tiempos mi labor profesional se ha centrado únicamente en el campo de la fotografía artística y por eso he querido destinar mis conocimientos y mi técnica a ofrecer al lector una serie de imagenes artísticas de la isla y que espero le sirvan para ampliar la visión que normalmente se tiene de Eivissa desde fuera», explicó al respecto la autora, que tras estudiar con el fotógrafo industrial alemán Hans Eick, ha trabajado para diversas campañas de publicidad y revistas tan prestigiosas como Stern o Playboy.

Otro punto de vista

Para completar su primer libro sobre Eivissa Ines Schramm ha contado con la colaboración de multitud de personas, tanto residentes como turistas, que se dejaron fotografíadas de forma completamente desinteresada. «El proceso de creación del libro también ha sido un trabajo muy gratificante para mí porque me ha permitido conocer personas tan especiales como Margalida, una señora payesa de 81 años que aún vive alejada de las comodidades de las nuevas tecnologías y a la que dedico un capítulo entero, así como a la Eivissa más profunda, formada por gente que sigue llevando a cabo sus labores relativamente alejada de todo lo que genera el turismo, y que aparecen en episodios como Matanza o Dones i Homes», confirmó.