Jóvenes promesas del diseño pitiuso mostrarán sus creaciones en Mallorca

Anna Budding, Raquel Espada, Laura Flynn, Silvia Gómez, Marga Jarrín y Esther Martínez forman el grupo de las elegidas entre las alumnas de modelismo. En el primer piso del castillo expondrán los mismos seis vestidos que desfilaron en la última pasarela Adlib, en junio de este año.

Espacio propio

Asimismo la escuela ha decidido darle a Giulietta Escandell un espacio destacado en la Muestra. «Es la que tiene más proyección de las chicas que han terminado este año. Su colección es sostenible gracias al uso de muchos materiales naturales», destaca su profesora, la diseñadora Carmen Coll. Esta formenterera de 21 años decidió mezclar hasta seis estilos en su colección ‘Natural Spirit’, su proyecto final de ciclo: «Tiene influencias del renacimiento italiano, referencias históricas, un aire hippie y un toque elegante. Todo ello en colores típicos formenterenses como los azules o el verde de las sabinas», explica Giulietta.

Por lo que respecta al grupo de diseño de interiores, o más concretamente, de mobiliario, Frederic Alexander Torres, Juan Carles Ramon, Montserrat Sola, Belinda Pardo, Javier Pardo e Irene Tur son los nombres en la lista de escogidos como los mejores de las últimas promociones. La decoración interior de una agencia de viajes, de un quisco de prensa o de un restaurante de sushi son algunas de las propuestas que se podrán visitar. Un séptimo nombre, el de Andrea Kuchenbaur, completa el cartel. Como en el caso de Giulietta, ella también ha sido elegida como la mejor por sus profesores y por ello, contará con espacio destacado en la exposición. La interiorista ha proyectado una reforma del Antiguo Convento de Santo Domingo para reconvertirlo en Museo de Ciencias y Naturaleza de Ibiza. «Ojalá pudiera llevarse a cabo, ya que no existe ningún museo de este tipo en la isla. El problema es la financiación», reflexiona Andrea. Su profesor Javier Magriñá destaca el trabajo de su alumna y añade «el cincuenta por ciento de los alumnos de todas las promociones son especialmente buenos. En estos casos siempre acaban trabajando de lo que han estudiado».

Casualmente, el antiguo convento de los dominicos que pretende remodelar Andrea en su proyecto fue la primera sede de la Escuela de Arte de Ibiza, centro que abrió sus puertas en 1935 como escuela de artes y oficios. En 1947 se trasladó al edificio de la Avenida España número 12 hasta 1995, y de ahí a Can Sifre, en Sant Jordi, donde se encuentra ahora. En la actualidad forma a unos 200 alumnos repartidos entre el bachillerato de artes y los ciclos formativos de artes plásticas y diseño de forja, ebanistería, mobiliario y moda.