Posiblemente haya djs como David Guetta, Luciano, Solomun o Carl Cox que tengan mayor nombre a nivel internacional pero es improbable que haya alguno con el éxito que tienen Petit y Vázquez entre la gente que reside en Ibiza durante todo el año. Y el sábado por la noche lo volvieron a demostrar, llenando hasta la bandera la carpa de Santa Gertrudis para celebrar la fiesta del décimo aniversario de La Movida.

A su favor juegan varios factores. Por un lado, el estilo de música que pinchan, con una amplia selección de temas que todo el mundo al menos ha bailado alguna vez en su vida; por otro, el espectáculo de diversión que montan en torno a su mesa de mezclas, y por último, un público entregado que acude con muchas ganas de pasárselo bien y en su mayor parte tuneados y disfrazados para la ocasión. Precisamente este es otro de los alicientes para muchos de los asistentes a la fiesta: el poderse vestir como cuando tenían veinte años, recordando lo que para muchos fueron tiempos mejores.

Por todo ello, la fiesta del sábado en Santa Gertrudis resultó un tremendo éxito. Tanto que la gente estaba tan a gusto que ni siquiera importó que la actuación de Petit y Vázquez se alargara más de la cuenta retrasando la salida de la supuesta estrella invitada, Chimo Bayo. De hecho, muchos de los presentes agradecieron la presencia de los ibicencos durante más tiempo del previsto para poder bailar y cantar como si les fuera la vida en ello antes de la llegada de la estrella de la desaparecida Ruta del Bakalao.