Para este año los puertos de Eivissa y Formentera esperan 124 escalas. | R.U.

El interés por las Pitiüses de quienes viajan en crucero y de las navieras sigue en aumento. Según las estadísticas de la Autoritat Portuària de Balears (APB), los puertos de Eivissa y la Savina serán los únicos de Balears que este año verán aumentar sus escalas, pasando de las 113 contabilizadas en 2013 (108 en Eivissa y cinco en Formentera) a las 124 (114 en Eivissa y 10 en Formentera) que se esperan para 2014.

A falta de cerrar el año, hasta octubre de 2013 llegaron a las Pitiüses 192.140 pasajeros de cruceros, una cifra lejana a los 251.752 cruceristas que se consiguieron la temporada anterior la que, sin duda, fue la mejor registrada en la historia del turismo de cruceros en las Pitiüses. “Ese año fue un récord absoluto sin duda”, recuerda Jiménez. Si bien el año pasado descendieron las escalas y los pasajeros respecto a 2012, se puede considerar una “buena temporada de cruceros para Eivissa” y se prevé mantener e incluso aumentar las cifras para este año.

Una tarea difícil, sobre todo en un mercado maduro en el sector crucerista como es el Mediterráneo. “Es un mercado en el que hay que luchar por mantener y conseguir más escalas, sobre todo mantenerlas, que ya es un éxito”, precisó Jiménez.

La consellera de Turisme de Eivissa, Carmen Ferrer, asegura que las cifras de 2012 se pueden volver a conseguir, pero destaca que hay que “intentar trabajar entre todos los sectores para atraer más escalas”. “Aunque es cierto que los cruceros están llegando con buenas tasas de ocupación, hay que continuar siendo atractivo y crear una comercialización conjunta de todo el destino para obtener más llegadas”, precisa Ferrer. La consellera añade también que las ventajas de la llegada de cruceristas a Eivissa se centran en que tienen “una mayor tendencia al gasto en el destino, además no ocupan una habitación hotelera, por lo que su consumo va más encaminado al resto de oferta (compras, excursiones, restaurantes...), y es un potencial turista de más días, en el sentido de que gracias a la escala del crucero descubre un destino interesante para volver a visitar con más tiempo o en otras circunstancias”.

El primer buque recalará en el puerto de Eivissa el 4 de abril será el FTI Berlin, que tiene 139 metros de eslora y espacio para 419 pasajeros. La temporada, sin embargo, acabará el 29 de noviembre con la última escala del Costa Luminosa, de 294 metros de eslora y con capacidad para 2.829 personas.

LA TENDENCIA. El puerto de Eivissa mantiene así dos tendencias. Por un lado, buques de mayor eslora con miles de turistas, y que cada vez más apuestan por el incremento de la estancia en la isla (hasta las 22 horas de escala), y otros más pequeños, con menos pasajeros, que eligen el destino por el carácter exclusivo de Eivissa. “Creemos que la escala larga es muy positiva para la isla porque con ella los cruceristas pueden hacer una excursión para conocer el destino, ir a la playa, de compras, de excursión a Formentera”, apunta Jiménez, quien añade que la APB ofrece bonificaciones a las navieras que apuesten por las estancias largas en puerto.

El delegado de APB en las Pitiüses afirma que Eivissa “se vende muy bien en el sector crucerista porque es un destino que tiene muchas posibilidades, tanto diurnas como nocturnas”. El interés es tal que incluso hay clientes potenciales de cruceros que “preguntan directamente a las compañías cuál es el crucero que va a Eivissa”.

En el aumento de la llegada de cruceros al puerto de Eivissa, la mejora y ampliación del puerto ha jugado un papel fundamental. En este sentido, hasta la construcción del dique de es Botafoc Eivissa únicamente podía recibir cruceros por debajo de los 200 metros, “que hoy en día sería una limitación muy grave para el puerto de Eivissa”, precisa Jiménez.

OBRAS EN EIVISSA. La remodelación de es Botafoc se ha completado con la explanada y la construcción de los dos muelles comerciales, así como con las pasarelas fijas y móviles. En su última visita a Eivissa, el presidente del gestor portuario, Alberto Pons, explicó que el muelle sur se extenderá para permitir la llegada de cruceros de más de 300 metros, una petición que formuló al principio de esta legislatura el Consell d’Eivissa. “Será un valor añadido más para el puerto de Eivissa. Estamos trabajando para la temporada 2015 y 2016 y, de hecho, acudiremos a la Feria de Cruceros de Miami, que es la más importante del mundo, para promocionar este trabajo”, explicó Pons. Así, en esta feria darán a conocer la capacidad del nuevo muelle y los trabajos que se han hecho hasta ahora en el puerto de Eivissa, al tiempo que se promocionará el destino. “En estas ferias hacemos un trabajo de promoción de los puertos de Balears y el destino, es decir, hacemos una doble promoción de las infraestructuras y del destino turístico”, precisó Pons, quien añadió que a estas ferias acuden con consignatarios, representantes de las navieras, representantes municipales y del Govern.