Seguramente pocos colectivos como el sector empresarial están tan pendientes de la realidad política. Es muy probable que sea porque su actividad es muy sensible a las decisiones que desde el terreno político se toman a diario. De ahí que la atención que hemos prestado a estas elecciones ha sido muy notable.

El interés está en las decisiones que se toman, no en los partidos. Por eso, el rumbo debe ser claro. Es la tenacidad y las convicciones lo que mantiene las empresas a flote, actitudes que tenemos que trasladar al frente de las organizaciones empresariales. Cuando hablamos de empresarios eso siempre es así en el plano individual y se acrecienta en la labor colectiva.
CAEB, que representa a CEOE y CEPYME, es la única confederación empresarial que aglutina a todos los sectores y a todo el territorio de Balears. En total, forman parte de nuestra red 81 organizaciones empresariales, que a su vez integran a miles de empresas. Es una posición que nos conduce a dar respuesta a la necesidad de cambio que en el tejido empresarial exige.

Y porque somos empresarios desde CAEB debemos consolidar la representatividad y la defensa ante la administración pública de los intereses de las empresas baleares con el objetivo de desarrollar una política económica que garantice estabilidad. Debemos sensibilizar a la sociedad de la importancia socioeconómica del sector empresarial y consideramos imprescindible reivindicar la imagen del empresario mediante actuaciones en el sistema educativo y de reconocimiento público a la trayectoria empresarial.
Trabajamos para ser un referente de opinión técnica del sector empresarial de las Islas y mejorar la competitividad de la economía en su conjunto, avanzar en la creación sostenida de empleo y en el bienestar económico y social de Balears con una política económica coherente con el modelo económico de las Illes Balears, que se conviertan en el marco de referencia a todos los niveles de la administración.

Como empresarios tenemos la obligación de reforzar nuestras posiciones para mejorar la financiación de la comunidad autónoma, una mayor inversión pública y la aplicación de un Régimen Económico y Fiscal Especial de Baleares.

En nuestra hoja de ruta también daremos prioridad al objetivo de participar en la gestión aeroportuaria y lograr garantías de suministro de mercancías y bienes de equipo por vía marítima.

Nuestro rumbo no solo lo marcan nuestros intereses propios sino que debemos desarrollar un mayor compromiso social y medioambiental, en favor de un modelo más sostenible por el bien de todos y también para mejorar como destino seguro de turismo e inversiones.

Por último, proponemos la adaptación de la formación profesional a las necesidades del modelo productivo y fomentar la formación dual para facilitar la incorporación de los jóvenes al mercado laboral.Este es nuestro compromiso que nos permitirá asentar nuestra actividad como empresarios y que igualmente favorecerá a los cientos de miles de trabajadores que nos acompañan. Sea como fuere, se trata de una actitud proactiva ante la sociedad, y nuestro entorno precisa de transparencia, calma y condiciones óptimas para la actividad empresarial.