¿Sabéis cuál es una de las últimas tendencias en redes sociales? Lo efímero. Contenido como fotos, vídeos, gifts, streaming (vídeo a tiempo real) que no permanece para siempre en nuestros canales sino que elegimos la duración que tendrá y luego desaparece. Al tratarse de contenido que se acabará “esfumando” podremos mandarnos información más privada.

Es precisamente por esto que los adultos deberán saber qué redes sociales están ofreciendo estos contenidos ya que, sobre todo entre adolescentes, hay muchas probabilidades de que se produzcan casos de sexting (intercambio de fotografías o vídeos con contenido sexual).

La reina por excelencia es Snapchat, donde se generan y borran 200 millones de fotografías diarias.

Otras redes con contenido efímero son por ejemplo: Facebook, que te permite crear publicaciones que desaparezcan en una fecha en concreto, y Periscope, que tras retransmitir a tiempo real y durante el tiempo que deseemos cualquier acontecimiento, mantendrá nuestro vídeo durante un día.

Y aquí es donde lanzo mi pregunta: ¿Cómo podremos realizar un análisis exhaustivo de los datos y de la interacción que generan?
Con este tipo de canales se añade un factor muy importante que es la rapidez (y el poder acceder a sus API). Si somos una marca tendremos que darnos prisa a la hora de ver los contenidos que los usuarios están generando para poder sacar conclusiones útiles en la toma de decisiones.