Balears pierde 8.507 millones al año por la insularidad | ARCHIVO

La consellera d’Hisenda i Administracions Públiques, Catalina Cladera, trabaja en la elaboración de un Régimen Especial de Balears (REB), tal y como pactaron el presidente del gobierno español Mariano Rajoy y Francina Armengol a principios de septiembre. Joan Carrió, director general de Pressuposts i Finançament y uno de los responsables del documento aún en fase de elaboración, confía en poder presentarlo al grupo de trabajo constituido con el gobierno central antes del verano. La propuesta estrella es, sin duda, un IVA reducido, tal y como tiene la isla francesa de Córgega.

SUBVENCIONES. El Govern plantea el nuevo REB en tres ejes fundamentales. De un lado, las subvenciones directas para compensar el coste de la insularidad. Se trata, en definitiva, de las ayudas clásicas como el descuento de residente para los viajes o la tarifa plana para los vuelos interislas, que diversas fuerzas políticas llevaban en su programa electoral. El Govern ha tenido en consideración el estudio elaborado desde la Universitat de les Illes Balears en 2014 en el que se hacía una aproximación al impacto del coste de la insularidad. “Ya sabemos a cuánto ascienden los costes y, por tanto, ahora lo que debemos plantear a Madrid son medidas para compensar estos costes”, asegura el director general Joan Carrió. En este sentido, el Govern estudia, por ejemplo, la conveniencia de una tarifa plana en una línea en la que hay competencia.

MEDIDAS FISCALES. El segundo gran eje es el referido a las medidas fiscales. La intención del Govern es recuperar la idea de la reserva para inversiones que planteó el Govern de José Ramón Bauzá. “La diferencia estriba en que el anterior ejecutivo lo planteaba como una medida única del nuevo REB y nosotros pensamos que ha de ser una medida más”, explica Carrió.

La medida fiscal estrella es conseguir un IVA reducido para Balears. Hasta ahora, Madrid siempre se había escudado en Europa para denegar la posibilidad legal de que Balears tuviera un IVA reducido. La reciente aprobación de Francia de un IVA reducido para Córcega cambia la situación. Ahora ya está claro que no hace falta ser unas islas ultraperiféricas para acceder a un régimen especial. Además, desde el Govern se valora muy especialmente el hecho de que un estado tan centralista como Francia haya otorgado un IVA reducido a Córcega y que haya obtenido el visto bueno de la Unión Europea.

Desde el Govern, Carrió considera que “disponer de un IVA reducido favorecería mucho a nuestro sector productivo, sobre todo a la hora de hablar de exportaciones e importaciones. No hay ninguna propuesta concreta aún, estamos trabajando”, explicó el director general que señaló que Presidència trabaja en la celebración de una cumbre entre Balears y Córcega en breve en la que se analizaría la repercusión del IVA reducido en la isla francesa.

FONDO DE INSULARIDAD. El tercer eje del REB que está preparando el Govern sería la dotación de un fondo específico de insularidad. Serviría para compensar todos los costes de insularidad que no se contemplan en los dos ejes anteriores. En definitiva, vendría a sustituir a las denominadas inversiones estatutarias. “El estado ha conferido a las inversiones estatutarias un componente de discrecionalidad que ha provocado que no lleguen a concretarse. Planteamos la creación de este fondo, que formaría parte de los presupuestos del Estado y que se calcularía de forma automática”, explica Carrió. El Govern considera que el gobierno central, con independencia de quién ocupe la Moncloa, tiende a ver con mejores ojos los acuerdos con comunidades autónomas que no afectan al marco general, como sería el caso.

De cualquier forma, el Govern es consciente de que para que el nuevo REB se convierta en una posibilidad real es imprescindible que se conforme un nuevo gobierno en Madrid. Desde el ejecutivo de Armengol se pretende, y con independencia de los factores externos, tener elaborada su propuesta de REB antes del verano. Asimismo, desde el Govern se trabaja en una propuesta de máximos, conscientes de la posibilidad que Madrid recorte los beneficios del nuevo REB para las Islas.