Conseguir un alto nivel de compromiso de sus empleados debería de ser un objetivo prioritario para todo buen líder empresarial. Para ello deberíamos hacernos algunas preguntas al respecto: ¿Cuál es realmente el compromiso de los empleados y por qué ello debe preocupar a los directivos? ¿Cómo fomentan las empresas el compromiso de sus trabajadores? ¿Cómo se puede crear una cultura corporativa y socialmente cohesiva en donde las personas se sientan verdaderamente comprometidas?

Para conseguir el compromiso de los empleados es necesario crear un lugar de trabajo del que se sientan orgullosos, al que se puedan sentir emocionalmente vinculados y que además puedan estar fuertemente apegados a la ética y a los valores principales de la empresa. Un puesto de trabajo con alto nivel de compromiso representa para las personas un lugar en donde realmente quieren y desean trabajar y en donde se sienten muy involucradas porque sus intereses personales y los intereses de la empresa están alineados.

Por ello y para crear una verdadera cultura de compromiso en la empresa se debe tener en muy alta consideración a todas las personas que en ella trabajan, pues si estas invierten un alto nivel de interés en su trabajo redundará en el éxito de la empresa. Además cabe destacar que las empresas que fomentan un alto nivel de compromiso de sus empleados tienen bajos niveles de rotación, lo que contribuye a la estabilidad y buena imagen social de la empresa.

Un error habitual es enfocarse en los empleados que demuestran una falta de compromiso, sin preguntarse antes por qué hay personas que no se sienten comprometidas con su empresa. ¿Se les da feedback periódicamente sobre su trabajo? ¿Se les premia y se les reconocen sus logros cuando se producen? ¿Existe una política de promoción adecuada? ¿Están claros y bien definidos los objetivos que han de conseguir? ¿Han participado en la toma de decisiones aportando la información que poseen sobre su día a día? ¿Se les valora como se merecen?
Los directivos que promueven un clima de alto compromiso se enfocan en los aspectos positivos de sus empleados, mientras que aquellos que critican habitualmente, controlan en exceso o no reconocen adecuadamente los esfuerzos realizados, tienden a crear empleados no comprometidos y desmotivados. También y para fomentar la cultura del compromiso es fundamental que los directivos cumplan siempre lo que dicen, pues de lo contrario generarán desconfianza en sus empleados. La mejor educación es la del ejemplo y las actuaciones de los directivos marcarán las bases del compromiso del resto de empleados.

Para que una empresa funcione es necesario que los clientes estén contentos, que los accionistas estén contentos (que tenga beneficios) y que los empleados estén contentos, y dado que lo que el jefe dice o hace tiene un impacto muy grande en la actitud de los empleados hacia su lugar de trabajo y hacia su empresa, es necesario tener verdaderos líderes que en lugar de su autoridad utilicen su liderazgo para conseguir el compromiso total de sus empleados.