Rafael Bonilla, delegado de ANAVRE en las Pitiüses, está al frente de Nautiservice. | DANIEL ESPINOSA

Nautiservice es una empresa de servicios náuticos que nació en el año 2012 en Mallorca con el objetivo de ofrecer a los armadores, operadores y usuarios de embarcaciones y buques de recreo un “servicio integral a la hora de afrontar la gestión de una embarcación, especialmente en el ámbito legal”, explica Jaime Darder, abogado especializado en náutica recreativa y coordinador en Balears de la Asociación de Navegantes de Recreo (Anavre). El equipo está compuesto también por Juan Enseñat Coll, economista y experto en fiscalidad náutica, y Xavier Jaume Mascaró, abogado y magíster en Derecho Marítimo por la Universidad de Deusto. Juan y Jaime son, además, expertos navegantes.

DESEMBARCO. Jaime Darder y Rafael Bonilla, delegado de ANAVRE en las Pitiüses, se conocieron en la pasada edición del Salón Náutico de Palma, donde comentaron la posibilidad de abrir delegación de Nautiservice en Eivissa. “El salto a Eivissa era lógico y deseado, puesto que Nautiservice tiene clientes en casi toda la geografía española y también en el extranjero. Muchos de estos clientes son asiduos navegantes y visitantes de las costas pitiusas por lo que poco a poco iban llegando casos procedentes de las Pitiüses. El acuerdo con Rafael Bonilla fue inmediato”, explica Darder, quien tiene claro que Nautiservice ha venido “para quedarse. Eivissa es una apuesta contundente de Nautiservice por implantarse firmemente en el sector náutico balear como proveedor de servicios jurídicos y administrativos para armadores, operadores y usuarios de todo tipo de embarcaciones”.

La delegación de Nautiservice en Eivissa cuenta con Bonilla y otras dos personas, además de tener el refuerzo de sus compañeros de Palma. “En todo caso, Nautiservice aquí está planificando cuidadosamente una expansión ordenada para evitar comprometer la característica principal de nuestra empresa, que es la atención personalizada”, destaca Rafael Bonilla, quien asegura que el sector náutico recreativo “por fin está saliendo de una crisis que ha sido larga y muy complicada para sus componentes”. Darder recuerda que cuando fundaron la empresa en Palma “tan solo uno de cada diez nuevos clientes lo era por la adquisición de un barco y, en todo caso, era de segunda mano. Actualmente, la mitad de nuestros expedientes corresponden a la adquisición de embarcaciones, ya sean nuevas o usadas. Y hemos observado un mayor volumen de contratación de chárter con respecto a la temporada pasada”.

En cuanto a cómo será esta temporada, el delegado de Nautiservice asegura que será “realmente buena” tanto en Eivissa y Formentera como en las demás islas y el resto del país.

Uno de los principales retos a los que se sigue enfrentando la náutica de recreo es alargar la temporada más allá de los meses centrales de verano. “Nuestro mar y nuestra costa merecen algo mejor que estar saturados durante dos meses cuando tienen tanto que ofrecer; quizá deberíamos buscar un modelo que atraiga más visitantes a lo largo del año evitando la masificación de julio y agosto, aunque es muy difícil”.

Otro de los retos a los que se enfrentan es el intrusismo, muy presente en la náutica y muy difícil de erradicar, como reconoce Jaime Darder. Echan un poco en falta la colaboración de la administración, tanto a nivel balear como estatal, “pero esto es algo endémico y tradicional; no tiene que ver con los colores de un partido o de otro; todavía tiene que llegar un gobierno que apueste decididamente por un sector que ofrece un gran potencial de crecimiento como es la náutica”, apunta Darder.

CAPITANÍA. Además de la gestión integral de todos los asuntos administrativos y legales que conciernen a la propiedad y gestión de una embarcación o buque, Nautiservice Ibiza contribuirá a reducir el colapso de Capitanía Marítima de Eivissa, que en la actualidad está bajo mínimos en personal. “Analizamos los expedientes caso a caso y los completamos antes de presentarlos a las administraciones, incluso recurriendo a reuniones previas para ver si falta algo. Así conseguimos que los nuevos expedientes tengan una tramitación más rápida, evitando requerimientos de aportación de nuevos documentos, por ejemplo. Es decir, intentamos no trabajar ‘anti’ sino conjuntamente con Capitanía Marítima”.