Imagen aérea de s'Arenal y Can Pastilla. | J. Furones

El Govern presentó semanas atrás el proyecto de presupuestos para 2017 y no ha subido el impuesto sobre estancias turísticas en las Illes Balears y de medidas de impulso del turismo sostenible. Mantendrá así los mismos precios que en 2016, que oscilan entre los 0,5 y los 2 euros, en función del establecimiento.

Los hoteleros, que de forma prácticamente unánime han optado por utilizar el sistema de estimación objetiva para liquidar el impuesto, han comprobado que deberán pagar más en 2017. La cuantía del impuesto no ha subido, pero el Govern ha modificado al alza uno de los criterios utilizados para calcular la estimación objetiva del impuesto sobre estancias turísticas. Concretamente, ha aumentado el número de días de estancia anuales por unidad en los diversos grupos establecidos de establecimientos turísticos.

La subida varía, aunque siempre es superior al 5% y en no pocos casos ronda e incluso supera el 10%. El Govern justifica su decisión argumentando que la estimación objetiva en vigor no se correspondía con la realidad, que la buena temporada y las perspectivas de futuro habían convertido el impuesto en rentable para los hoteleros. La Federación Hotelera de Mallorca calcula que el incremento medio es del 8%.

Los empresarios, en cambio, explican que una mala temporada les puede suponer pérdidas importantes con las estimaciones objetivas del impuesto turístico. Reconocen que el saldo les era positivo, aunque ni un solo hotelero es partidario de mantener el impuesto por los beneficios que les produce. De hecho, aseguran que el coste y las molestias que les causan la recaudación y la tramitación del impuesto son mucho mayores que los posibles beneficios económicos que les pueda dejar.

El Govern ha aprovechado la modificación del Decreto 35/2016 para subsanar alguna deficiencia detectada durante los primeros meses de aplicación. En este sentido, consideran que no tenía ningún sentido que en el grupo primero, que contabilizaba 146 días por número de días de estancia anuales por unidad, estuvieran, por ejemplo, los hoteles de dos estrellas y los de cinco.

Los módulos aplicables a los establecimientos turísticos para determinar el número total de días de estancia del ejercicio han sido modificados al alza para recaudar más.

En el grupo primero figuran ahora los establecimientos de cinco estrellas, además de los hoteles rurales, y el número de días de estancia anuales por unidad ha pasado de 146 a 162. En el grupo segundo, al que pertenecen los establecimientos de cuatro estrellas, se ha pasado de 166 días a 181.

Los establecimientos de tres estrellas, que se encuentran ubicados en el grupo tercero, han pasado de 174 a 186 días. Los hoteles de una estrella y los agroturismos pertenecen al grupo cuarto, que tenía un número de días de estancia por unidad de 143 y ahora es de 154. En el grupo quinto están los hostales y residencias de dos y tres estrellas, que han pasado de 120 días a 134. De 106 días en 2016 a 117 en 2017 es el incremento experimentado por el grupo sexto, en el se encuentran los hostales de una estrella, las casas de huéspedes y las pensiones. En el grupo séptimo, destinado a los albergues, refugios, fondas, hospederías y posadas, se ha pasado de 61 días a 68.

Las viviendas turísticas y los campings objeto de comercialización turística también han sufrido diferentes incrementos en función del número de plazas ofrecidas al año.

El Govern ha creado en 2017 el grupo noveno en el que se encuentran ubicados los establecimientos de dos estrellas, que tributarán por 156 días.

LOS EJEMPLOS. Los diferentes ejemplos elaborados por El Económico confirman un incremento que en algunos casos supera el 10%.

Un primer ejemplo afecta a un hotel de 3 estrellas de Menorca, de 100 plazas, que abra el primero de mayo y cierre sus puertas el 31 de octubre, completando así una temporada de 184 días. En 2016 habrá pagado un total de 10.262,43 euros, mientras que el año que viene pagará 10.970,43. La diferencia es de 707,77 euros, un 6,90% más.

El segundo ejemplo es de un hotel de Mallorca de cuatro estrellas y con un total de 180 plazas. Si ha estado abierto del uno de abril al 31 de octubre, 214 días, habrá pagado 35.475,34 euros en 2016, mientras que el año que viene, con idénticos parámetros, habrá de abonar 38.680,94 euros. La diferencia es de 3.205,60, un 9,04%.

Un tercer ejemplo afectaría a un hotel de 5 estrellas de Eivissa, de 350 plazas, que haya abierto sus puertas un total de 214 días, del primero de abril hasta el 31 de octubre. Al final del año habrá pagado en 2016 un total de 72.802,80 euros, mientras que con idénticos parámetros habrá de pagar 80.781,19 euros el año que viene. Es decir, abonará 7.978,39 euros más, que supone un incremento del 10,96%.