El Black Friday y la Navidad han impulsado las compras.

El año 2016 se cierra con un crecimiento esperado del Producto Interior Bruto de las Islas del 4,1% y con la previsión de que 2017 irá bien, pero comparativamente peor, ya que se espera que el crecimiento se sitúe entre el 2,5% y el 3,7% según las diferentes fuentes.

El año que dejamos atrás ha sido trepidamente, con acontecimientos a nivel global que pueden cambiar el statu quo. La decisión de los británicos de salir de la Unión Europea junto con la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos se han sumado al escenario económico de bajos tipos de interés en Europa y el problema de los refugiados. El Fondo Monetario Internacional espera un crecimiento mundial del 3,1% en 2016, pero solo del 1,6% en las economías avanzadas y del 1,7% en la Unión Europea. Por lo que respecta a la economía doméstica, España finalmente tiene Gobierno, auque en minoría, y la geometría variable del Parlamento hace que en 2017 podamos esperar cambios en la normativa laboral. Sigue siendo una de las economías más dinámicas del mundo, con un crecimiento esperado del 2,8% en 2016 y del 2,3% en 2017 según la OCDE.

Ya en Balears, 2016 ha sido el año de la ecotasa y de la saturación turística. No se espera que el brexit tenga efectos tan nocivos como los que se anunciaron en cuanto se supo del resultado del referéndum de permanencia, ya que en la temporada turística de 2016 ni el número de turistas ni su gasto disminuyó. Sin embargo, durante este año se verá cómo se desarrolla la desconexión y cómo impactará el tipo de cambio en el poder adquisitivo de los británicos que visiten las Islas. Organizaciones como Funcas consideran que Balears será una de las comunidades más afectadas por la desconexión británica y pronostica un crecimiento del 2,5% en 2017 frente al 3,5% de 2016, un punto porcentual menos.

Varias grandes cadenas hoteleras han anunciado importantes planes de inversión en sus establecimientos y para 2017 se esperan cifras de llegada de turistas similares a las del pasado año, lo que permite afirmar al Govern balear que los servicios y la construcción volverán a ser los sectores más dinámicos. Eso sí, todos los sectores crecerán menos en 2017, por lo que se espera una desaceleración que situará el crecimiento en el 3,7% en 2017 frente al 4,1% de 2016. Esta previsión coincide con una progresiva merma de los efectos beneciosos provocados por los vientos de cola (bajo precio del petróleo, bajos tipos de interés y depreciación del euro).

La inflación acumulada hasta noviembre era del 1% en Balears, idéntica a la del conjunto de España. Y las exportaciones hasta el mes de ocubre han sido de 865,5 millones de euros, inferiores a las de 2015, por valor de 905,4 millones de euros.

Los expertos consultados no dudan de que 2016 ha sido el año de la recuperación del empleo y de la inversión. Sin embargo, cuestiones como la inestabilidad política, la mejora de la financiación y la precariedad laboral todavía están por resolver. En cuanto a lo público, esperan que este año se pueda cumplir el objetivo de déficit del 0,7%.

Catalina Cladera, consellera d’Hisenda i Administracions Públiques, se muestra satisfecha de la evolución económica de Balears durante el pasado año, tanto del crecimiento del PIB como de la estabilidad de la deuda pública y del cumplimiento del objetivo de déficit. “Balears cerrará 2016 con el crecimiento del PIB más elevado de todo su entorno con un 4%. En 2017, las Islas mantendrán este liderato en el ámbito español y europeo con el 3,7% de aumento, según las previsiones del Govern que se sustentan con los augurios de otras entidades.

Además, por primera vez en los últimos años, la deudad de Balears se ha mantenido estable. De junio de 2015 a septiembre de 2016 se ha reducido del 30,8% al 30,7% del PIB. Y en cuanto al déficit, cumpliremos y acabaremos por debajo del límite fijado del 0,7%”, explica Cladera.

La consellera d’Hisenda destaca también que se haya conseguido reducir el periodo de pago a los proveedores. “El último indicador que quedaba por normalizar, el del periodo de pago a proveedores, también ha suavizado su comportamiento, y el pasado mes de noviembre se situó en 46 días de demora. Pensamos que con las medidas que hemos incluido en el presupuesto, en 2017 podremos controlar mejor los plazos de pago”, asegura.

Cladera se muestra orgullosa del presupuesto elaborado para 2017 y recuerda que se puede seguir avanzando para mejorar la sociedad. “Con el actual marco económico, combinado con una perspectiva prudente de mejora de los ingresos, podemos contar con un presupuesto razonable y realista para continuar trazando la hoja de ruta marcada por los Acuerdos de Gobernabilidad. No se trata solo de crear riqueza, sino de crearla bien. Y de repartirla mejor. Tenemos margen de mejora para caminar hacia una sociedad más justa, con las mismas oportunidades para todos”, sentencia Cladera, que fija como grandes retos la mejora de la financiación y la compensación de los costes de insularidad.

“Continuamos embarcados en la mejora de nuestra financiación y en la compensación de los costes de insularidad. No podemos esperar los resultados cruzados de brazos. Un tercio de nuestra población vive al borde de la pobreza. Necesitamos soluciones. Y ha de ser ahora”, acaba diciendo Cladera.

El conseller de Treball, Comerç i Indústria, Iago Negueruela, asegura que 2016 ha sido positivo para el empleo. “El año que acabamos de cerrar ha sido el de la recuperación del empleo, pero desde la Conselleria se ha trabajado para la recupación de la calidad del empleo. Unos 5.500 trabajadores han visto mejoradas sus condiciones de trabajo, gracias al plan de lucha contra la precariedad. 2016 también ha sido un año de apuesta y apoyo al pequeño comercio con un plan para el comercio de proximidad y con la modificación de la Llei del Comerç, que entre otros aspectos, reduce el número de días festivos de apertura comercial. Además, el programa público de contratación ha permitido que a través de ayuntamientos y consells se hayan contratado a más de 1.100 personas desocupadas”, explica el conseller, que no duda en catalogar el año 2017 “como el de la industria”. “2017 será el año de la industria.

Aprobaremos la primera Llei d’Indústria de Balears y tendremos un plan industrial para desarrollar política que contribuyan a la diversificación del modelo productivo. El año que ahora comienza también consolidará el SOIB como el instrumento para mejorar las oportunidades de encontrar trabajo y para la recalificación de las personas desocupadas”, finaliza diciendo Negueruela.

Miquel Ensenyat, presidente del Consell de Mallorca, destaca el esfuerzo inversor realizado durante 2016 en los municipios. Al tiempo, Ensenyat pone especial énfasis en destacar que durante este año se invertirán 20 millones más. “Durante 2016, el Consell de Mallorca, a través del departamento de Desenvolupament Local, ha invertido 30 millones de euros en los municipios de la isla. Ello conlleva la dinamización de las economías locales de nuestros pueblos y la creación de puestos de trabajo. El Consell invierte en economía productiva con retorno a la sociedad”, afirma el presidente del Consell. “Para 2017 tenemos prevista una inversión de 20 millones de euros más en nuestros municipios. Es decir, que durante el bienio 2016-2017, el Consell habrá inyectado 50 millones de euros en mejorar las infraestructuras de los municipios, dando trabajo a las empresas locales”, acaba significando.

La presidenta de la CAEB Carmen Planas asegura que Balears ha consolidado la recuperación durante 2016. “Durante el año pasado la economía de Balears consolidó la senda de la recuperación y se regeneró el tejido empresarial gracias a la creación continua de empresas y la inversión en modernización. En todo caso, la economía ya ha entrado en una fase más madura del ciclo, con crecimientos más moderados”, afirma Planas.

Respecto a 2017, la presidenta de la CAEB augura que la economía de Balears continuará creciendo de forma más lenta. “Respecto a la previsión para 2017, aunque todavía faltan por conocer los datos del último trimestre de 2016, todo apunta a que la economía balear seguirá creciendo, aunque a un menor ritmo como consecuencia de la pérdida de protagonismo de la inversión. Crecer a costa de ser competitivos en costes en lugar de hacerlo a través de un aumento de la productividad, que sigue retrocediendo, nos hace vulnerables”, explica. Planas aboga por la necesidad de realizar cambios estructurales, reclama estabilidad. “En la CAEB entendemos que Balears necesita hacer cambios estructurales para mejorar la productividad de las empresas porque es la única manera de crear más empleo y de mayor calidad y mejorar así la renta per cápita y el bienestar de los ciudadanos. Pedimos a las administraciones estabilidad, seguridad jurídica y medidas de apoyo a las empresas para que podamos invertir, seguir creando empleo y generar puestos de trabajo estable y de calidad porque aún tenemos más de 68.000 parados y, por lo tanto, queda mucho por hacer”, afirma finalmente Planas.

El director técnico de la Fundació Impulsa Antoni Riera explica que 2016 fue el año de la recuperación de los niveles de actividad y prevé un crecimiento de la economía menos acelarado en 2017. “Si 2015 fue el año de la recuperación de la ocupación, 2016 fue el de la recuperación de los niveles de actividad pre crisis. Por primera vez, el PIB de Balears alcanzará los 27.000 millones de euros a precios constantes de 2007. En 2017 se normalizarán los contadores de ocupación y actividad. La economía entrará en una fase más madura, menos acelerada, que habría de aprovecharse para reforzar la productividad”, indica Riera.

El profesor de la UIB Pep Ignasi Aguiló explica que 2016 la fuerte recuperación se cimentó en pilares no siempre sólidos. “El año 2016 estuvo marcado por una fuerte recuperación, aunque no siempre apoyada en sólidos pilares, como es el caso de los artificialmente bajos tipos de interés. En 2017 deberíamos apoyarnos menos en los pilares menos sólidos para hacerlo más en los más sólidos de las reformas con la finalidad de que la inercia continúe”, explica.

Antoni Costa, profesor de la UIB, valora la consolidación del crecimiento, aunque critica la política económica del Govern de Francina Armengol. “El año 2016 fue el año de la consolidación definitiva del crecimiento, si bien vivimos un cambio a peor en la política económica del Govern. 2017 será el año de los 500.000 empleos creados y en Balears el del cumplimiento del objetivo de déficit”, afirma.

El profesor de la UIB Antoni Alcover no duda en catalogar de “récord” el año 2016. “El pasado año fue récord en llegada de turistas, en PIB y en número de empleados, aunque también lo fue en impuestos. Esperemos que 2017 sea como mínimo tan bueno. A nivel español, hemos vivido un año de consolidación de la recuperación con alguna incertidumbre derivada de la política. En cambio, a nivel internacional ha estado marcado por las turbulencias provocadas por el brexit, la elección de Trump y otras sorpresas. En principio, durante este 2017 se irá disipando de forma paulatina la incertidumbre. Será determinante el comportamieto de los tipos de interés, ya que tendrá un papel decisivo en el desarrollo económico. Además, hay que considerar también que las elecciones en diferentes países de Europa pueden provocar algún episodio de incertidumbre”, asegura Alcover.

El economista Esteve Bardolet muestra su cara más pesimista, si bien reconoce que la situación económica continúa mejorando. “2016 fue un año para olvidar. Las noticias negativas nos abruman, son una constante. Y 2017 es un año para soñar. En todo caso, es cierto que desde el punto de vista estrictamente económico la recuperación es un hecho incuestionable”, argumenta Bardolet.

Ramon Poch, doctor en economía y derecho, valora los avances conseguidos, aunque los cataloga de “insuficientes”. “En España se dieron avances positivos durante 2016, aunque claramente insuficientes en cuestiones como el paro estructural, el déficit público y la deuda exterior. Además, se ha llevado a cabo una inadecuada gestión del riesgo catalán. Las incertidumbres populistas seguirán llenando de inquietud el año 2017 en el panorama político-económico global y, en especial, en la eurozona. No obstante, se prevé un tono ligeramente optimista”, indica.

El presidente de la Cámara de Comercio Josep Lluís Roses centra su discurso en el empleo. “El 2016 fue el año de la consolidación de la mejora del empleo. Balears ha sido líder. En 2017 se ha de continuar mejorando la economía y la calidad de los puestos de trabajo”, explica.

El economista ibicenco José Antonio Avellaneda se congratua por el excelente 2016, al tiempo que apuesta porque 2017 sirva para consolidad las mejoras. “Las Pitiüses han crecido por encima del 4% por méritos propios y con un desempleo en mínimos. La temporada pasada presenta unos números récord de ocupación hotelera y un claro crecimiento en el tráfico aéreo y marítimo. En 2017 debe consolidarse la desestacionalización. El gran reto es controlar la oferta de alojamiento ‘alegal’ y perseguir la ilegal. Es imprescindible buscar soluciones de alojamiento digno para las personas que vienen a trabajar”, explica.

Para Alfonso Rojo, presidente de PIME Balears, 2016 ha sido un buen año. “Por los niveles de ocupación turística fue un buen año, pero no hemos notado los aumentos de caja en la misma proporción que el incremento del número de visitantes”, indica. Asimismo, considera que los principales retos de 2017 serán la regulación del alquiler vacacional y la mejora de la financiación autonómica.

El presidente del Cercle d’Economia de Mallorca Andreu Rotger recuerda cómo 2016 fue el año en el que la sociedad civil reclamó de forma mayoritaria un nuevo sistema de financiación. “Casi 70 instituciones apoyaron el pasado mes de octubre un manifiesto de la sociedad civil a favor de un nuevo sistema de financiación, un régimen especial insular, mayores inversiones del estado y la condonación de la deuda. Destacaría también el crecimiento económico, aunque se ha de crear empleo mejor remunerado para que no haya trabajadores pobres. El Govern ha puesto en marcha la formación dual, que es muy importante, aunque estamos lejos de conseguir buenos objetivos en educación”, explica Rotger.

Respecto a 2017, el presidente del Cercle de Mallorca expresaba su optimismo. “Ha de mejorar el sistema de financiación autonómica, la redistribución de la riqueza, la reducción de la desigualdad y la mejora de la competitividad. Además, y antes de incrementar los impuestos, esperamos que los partidos políticos se pongan de acuerdo en mejorar la eficiencia del sector público”, acaba señalando.

Bartomeu Rosselló, presidente del Cercle Mallorquí de Negocis, advierte de que se están repitiendo algunos errores pre crisis. “2016 fue un año de asentamiento tras un periodo de muchas restricciones. Desgraciadamente, repetimos algunos errores de antes de la crisis. No hemos hecho todos los cambios necesarios. 2017 es un año con muchas posibilidades que hemos de saber aprovechar”, argumenta.

Francisco Martorell, presidente de Asima, considera que 2016 ha sido un buen ejercicio ya que se ha conseguido “remontar” años anteriores. “Confío en que 2017 sea un poquito mejor, donde los empresarios tenemos que seguir trabajando en la misma línea, haciendo nuestros deberes, reinventándonos y seguir impulsando planes internos y estratégicos que nos permitan corregir debilidades y afianzarnos ganando competitividad”, concluye.