Imagen de uno de los cursos de hostelería que actualmente se imparten en el Instituto Mª Àngels Cardona de Ciutadella para jóvenes. | Josep Bagur Gomila

La aprobación a finales de este mes de enero del protocolo general de intenciones entre el Consell d’Eivissa y el Govern balear para la instalación de una delegación en las Pitiüses de la Escuela de Hostelería de Balears en uno de los pabellones del recinto de Sa Coma, ha devuelto a la actualidad una de las históricas reivindicaciones de Menorca para poder contar también con una sede propia. Una demanda que nace en 1995 desde la Asociación Hotelera de Menorca (Ashome), cuando la Escuela de Hostelería de Balears arrancaba en Mallorca con su primer curso en el mes de octubre.

Veintidós años más tarde, sigue más vigente que nunca la petición por parte de la patronal, que considera básica esta infraestructura pública para evitar que sucedan situaciones como las que ya están ocurriendo en la preparación de la próxima temporada, con una fuerte demanda de jefes y ayudantes de cocina que no se están pudiendo cubrir y han obligado a Ashome a tener que insertar anuncios de trabajo fuera de la isla.

Actualmente la oferta académica en materia turística de Menorca está compuesta por un centro privado, la Escuela de Turismo de Balears Felipe Moreno, en la que el alumnado tiene acceso a estudios relacionados con el sector turístico desde la ESO hasta la universidad. Se completa con la formación del grado de Turismo de la Universitat de les Illes Balears en Alaior y la oferta de Formación Profesional de grado medio y superior que ofrecen en el Instituto Maria Àngels Cardona.

La gerente de los empresarios hoteleros, Azucena Jiménez, manifiesta que lo que está pidiendo el sector es un centro de formación que pueda servir para el reciclaje de todos aquellos profesionales que llevan años en hostelería pero necesitan actualizarse, así como para todos los nuevos trabajadores que se incorporan al mercado laboral turístico pero provienen de sectores como la construcción.

“No estamos hablando de una escuela de formación continua como la que ya existe en el Instituto Mª Ángels Cardona para jóvenes que siguen sus estudios, sino que tiene que ser un centro enfocado a personas adultas, que no pueden estar un año y medio formándose porque están en otra etapa de la vida en la que necesitan trabajar y estudiar”, explica la gerente. “No podemos enviar a la gente de cuarenta y cinco años al instituto sino que se necesita un centro como la Escuela de Hostelería de Balears que disponga de un programa formativo a medida, en el que estén implicadas las consellerias de Treball y Turisme del Govern y así como la Universitat de les Illes Balears para que esté garantizada su viabilidad”, añade.

Jiménez considera que hasta la fecha se ha venido supliendo las carencias con la acciones formativas de la Fundación Tripartita o con los certificados de Profesionalidad de SOIB, pero lo que está en juego es la formación y la profesionalización del sector turístico en Menorca ante una coyuntura en la que el viajero, quiere vivir una experiencia que tiene que ser completa. “Formar al personal significa mejorar la calidad y el servicio”, concluye. La directiva de la patronal añade que se han brindado ubicaciones en Maó y Sant Lluís al Govern, pero la respuesta es que todo sigue en estudio.

Por su parte, desde el Consell Insular, a través del conseller Miquel Company, se ofrecen como mediadores entre la patronal hotelera y el Govern para poder encontrar una solución de consenso.

LARGA REIVINDICACIÓN. Cuando el desarrollo turístico llegó a Menorca y empezaron a crecer las plazas turísticas, trajeron aparejados un boom de solicitudes de trabajadores donde se vio la necesidad de formar al personal. En aquel momento la patronal del sector hotelero ya empezó a hablar con la administración para que pudiera existir algún tipo de formación no reglada para trabajadores de mediana edad que se pudieran incorporar al turismo provenientes de otros sectores diversos. Pese a llegar a convertirse en una demanda de consenso tanto a nivel empresarial como institucional, los sucesivos cambios de gobierno o las disputas por su ubicación fueron demorando la decisión.

La hemeroteca conserva titulares curiosos en relación con este asunto. Por ejemplo, en 2004 el Govern balear de Jaume Matas anunciaba que se construiría la nueva Escuela de Hostelería de Menorca con una partida ya consignada o, incluso cuatro años más tarde, que Ashome en un intento por disponer de una Escuela de Hostelería, ofertaba los hoteles cerrados o sus propias instalaciones para acciones formativas.