La isla de Eivissa cuenta con 20.500 plazas legales de viviendas turísticas, todas ellas situadas en suelo rústico.

El número de plazas de viviendas vacacionales en la isla de Eivissa no podrá superar las 20.500. Así se fijó el 2 de mayo en la Comisión de Ordenación Turística del Consell d’Eivissa, un órgano formado por todos los partidos, empresarios, sindicatos y ayuntamientos, que estableció este techo tomando como referencia las plazas de alquiler turístico ya existentes, por lo que en definitiva se estableció el ‘crecimiento cero’ en el número de plazas de viviendas vacacionales.

Además de fijar este límite, la Comisión también aprobó la creación de una nueva bolsa de plazas turísticas, pensada expresamente para las viviendas vacacionales. Hasta el momento, en Eivissa solo existía una bolsa de este tipo para plazas hoteleras, por lo que las viviendas vacacionales no estaban sujetas a ninguna limitación. No obstante, al fijar el límite de plazas en 20.500 (todas ellas en casas de campo), la bolsa de viviendas vacacionales nace con cero plazas disponibles, por lo que si alguien quiere adquirir alguna primero se tendrían que dar de baja alguna de las que ya están otorgadas. El precio de estas plazas de viviendas vacacionales es de 4.200 euros.

SIN ZONIFICACIÓN. Pese a fijar el techo de plazas turísticas, el Consell d’Eivissa ha sido incapaz de aprobar la zonificación del alquiler turístico. La propuesta del equipo de gobierno de la máxima institución insular, formado por PSOE y la coalición Podem-Guanyem, recogía las peticiones realizadas por los cinco ayuntamientos ibicencos. Concretamente, se prohibía el alquiler turístico en plurifamiliares en toda la isla y se permitía en suelo rústico no protegido en los municipios de Sant Antoni de Portmany, Sant Josep de sa Talaia y Sant Joan de Labritja.

Sin embargo, el conseller de Medi Ambient, Miquel Vericad, votó en contra de la propuesta de su propio equipo de gobierno. Un voto que unido a los del Partido Popular, en la oposición, dio al traste con la propuesta.

Vericad, que pertenece a Guanyem, cumplió con las órdenes de su formación, que está totalmente en contra de permitir el alquiler turístico en la isla de Eivissa, tanto en suelo urbano como rústico.

Esta situación ha provocado una crisis de gobierno en el Consell d’Eivissa. Para Podem, el hecho de que la bolsa de plazas de viviendas turísticas nazca con cero plazas disponibles ya cumple sus expectativas. Tanto PSOE como Podem han exigido a Vericad que dimita al votar en contra de uno de los acuerdos fijados al inicio de la legislatura.

A pesar de la no aprobación de la zonificación, la legislación vigente hace que el alquiler turístico en plurifamiliares continúe prohibido en Eivissa.

SANCIONES. En este 2018, el Consell d’Eivissa ha iniciado nueve expedientes de sanción por viviendas turísticas ilegales. De estos, uno es por una infracción leve, que se sanciona con hasta 4.000 euros, tres son graves, con sanciones de hasta 40.000 euros, y cinco muy graves, que pueden acarrear multas de hasta 400.000 euros.

Además, a estos expedientes hay que sumarle once más que todavía están en fase de diligencias y que está previsto que en breve se les abra el oportuno expediente sancionador. Entre estos expedientes hay viviendas pero también plataformas comercializadoras, que se enfrentan a sanciones máximas que pueden llegar hasta los 1,5 millones de euros.

Según la máxima institución insular, estas sanciones se producen después de las más de 300 diligencias realizadas en 2017. En total, el Consell d’Eivissa ha iniciado 30 expedientes de sanción en materia turística.

PLAZAS TURÍSTICAS. El número total de plazas turísticas de la isla de Eivissa es de 100.170. La mayor parte de estas plazas corresponde a la planta hotelera, con 56.000 plazas, mientras que a continuación aparecen las 21.500 plazas de apartamentos turísticos y las ya mencionadas 20.500 plazas de viviendas de alquiler turísticas. Otras 1.500 plazas corresponden a los campings autorizados en la isla, y las 670 plazas restantes pertenecen a los alojamientos de turismo rural.

No obstante, desde el sector turístico aseguran que en la isla de Eivissa hay alrededor de 50.000 plazas ilegales, ya que las cifras de pasajeros que llegan al aeropuerto y el número de plazas turísticas no concuerdan. El número de plazas turísticas todavía podía crecer ya que en la bolsa de plazas hoteleras hay 9.000 disponibles. El proceso de modernización de la planta hotelera que se ha llevado en los últimos años, propiciado por la Ley General de Turismo de Baleares de 2012 que favorecía el aumento de categoría y la reconversión hotelera, provocó que muchos empresarios disminuyeran el número de plazas de sus establecimientos hoteleros e incrementaran su calidad.