Del 4 al 6 de noviembre se ha celebrado en Londres la feria turística más importante a nivel mundial (con permiso de Fitur): la World Travel Market. El más que probable brexit en breve y la quiebra de Thomas Cook han marcado la edición de este año, junto con alguna otra noticia destacada, como que IAG, grupo aéreo que engloba a Iberia, British Airways, Vueling, Air Lingus y Level, ha acordado con Globalia comprar Air Europa por 1.000 millones de euros, lo que supondrá la unión de las dos mayores aerolíneas españolas.

Los encuentros con las principales patronales, turoperadores, grupos empresariales e instituciones públicas han de servir para promocionar y vender las Islas de cara al próximo año, en especial en temporada media y baja, sobre todo al turismo británico y alemán, principales visitantes de las Islas.

Como cada año, a la feria londinense han asistido representantes de las grandes empresas turísticas de Baleares, así como los principales representantes públicos (la presidenta del Govern, Francina Armengol; el conseller de Turisme, Iago Negueruela, o el alcalde de Palma, José Hila). Precisamente este último ha querido potenciar la marca Palma como un destino “sostenible”, aludiendo a que la ciudad ha hecho una apuesta turística con el objetivo de ser valorada más allá del sol y playa, hecho consumado por la ocupación que tienen los hoteles durante todo el año y la proliferación de hoteles boutique por el centro de la capital.

También hemos sabido esta semana, según datos del Instituto Nacional de Estadística, que Balears recibió en septiembre 2 millones de turistas internacionales, lo que representa una bajada del 1,2% respecto al mismo mes del año anterior, si bien el gasto fue de 2.134 millones de euros, un 0,3% más que en el 2018.

Aun así, Balears sigue siendo el segundo destino principal de los turistas en septiembre, con el 22,5% del total, por detrás de Catalunya (que se mantiene a pesar de los tiempos convulsos que están padeciendo). Los principales mercados para las Islas en septiembre han sido el alemán y el británico (32,2% y 30,2% respectivamente).