En los últimos meses podemos observar una tendencia tech que está generando muchos titulares. Los NFT (non-fungible tokens) son activos digitales únicos e irrepetibles con el uso de la tecnología blockchain. Por hacer un paralelismo, el bitcoin y la criptomonedas son a las divisas algo así como los NFT a las piezas de arte. Con la diferencia de que los bitcoins son fungibles (ya que un bitcoin es igual a otro bitcoin) y sin embargo los NFT son no fungibles ni replicables.

Pero los NFT no son del todo algo nuevo, hacia 2012 salieron los Colored Coins basados en bitcoin o en el año 2017 los CryptoKitties, basados en Ethereum. Podríamos considerarlos como sus antecesores.

Como casos más recientes podemos encontrarnos algunos ejemplos, como puede ser la venta del primer tuit escrito por uno de los fundadores de Twitter y actual CEO por el que recibió 2,9 millones de dólares que decidió donar a un fondo destinado a África. El comprador fue Sina Estavi. Otra de las grandes ventas ha sido la de Mike Winkelmann, más conocido como Beeple, que vendió su obra digital por 69 millones de dólares en la prestigiosa casa de subastas Christie’s. También podemos encontrarnos casos como el primer inmueble digital NFT vendido por más de medio millón de dólares. El comprador con sede en Toronto recibió clips y archivos 3D para su adquisición. Con los archivos, puede cargar la casa en el metaverso y también puede recrear la propiedad en el mundo real.
Su falta de regulación y la obtención de hasta un 1000% de beneficios en la reventa son algunas de las motivaciones que mueven a los primeros compradores.

El mercado de NFT abarca cualquier cosa, desde el arte digital hasta viviendas, publicaciones de redes, los deportes o la moda en formato digital. ¿Será una tendencia imparable? Alguna de las plataformas que puedes visitar para hacerte más a la idea de lo que estamos hablando son: Opensea, NBA Top Shot o Hypto (bajo invitación).