Las reuniones de trabajo se prodigaron durante los tres primeros días de la Feria en el estand de Balears.

Un nuevo modelo de turismo. La presidenta del Govern, Francina Armengol, presentó días atrás en Madrid el turismo del futuro al que pretende conducir a Balears. Armengol, en compañía de Iago Negueruela, conseller de Model Econòmic, Turisme i Treball; Miquel Mir, conseller de Medi Ambient i Territori, y Mae de la Concha, consellera d’Agricultura, Pesca i Alimentació, explicó el pasado lunes día 17 la reforma de la Ley del Turismo que ha de convertir a las Islas en pioneras con una apuesta clara por la sostenibilidad y la economía circular. Dos días después, ya en Fitur, el Govern insistió en la reforma de la Ley del Turismo y su nuevo modelo, que aseguran que mejorará la experiencia del turista y también la calidad de vida de los residentes y los trabajadores del sector. Se trata, en definitiva, de que Balears sea un destino sostenible económicamente, socialmente y medioambientalmente. Desde el Govern, en una y otra presentación, se insistió en la necesidad de que haya una clara colaboración público-privada, al tiempo que se insistía en la necesidad de negociar, de llegar al máximo consenso posible.

Balears pretendía ser protagonista en la jornada de Exceltur, que se celebraba el martes en Ifema y marcar la agenda de Fitur. Solo lo consiguieron en parte.

El catedrático de la UIB Antoni Riera, director de la Fundació Impulsa, dio un paso más atrevido en la presentación que tuvo lugar el lunes día 17 en el museo de arte Reina Sofía de Madrid y aseguró que Balears debe avanzar hacia un turismo regenerativo. Es decir, que la presencia de turistas, entre otras cuestiones, contribuya a mejorar el entorno y la vida de los residentes. Hoy por hoy, Balears se encuentra lejos del turismo regenerativo por diferentes y múltiples razones. En este sentido, es evidente que la presencia de visitantes provoca un considerable desgaste en el medio ambiente y provoca, además, el rechazo de una parte de la población.

El acto contó con la presencia de Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social; Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo; Unai Sordo, secretario general de Comisiones Obreras; Pepe Álvarez, secretario general de UGT, además de importantes hoteleros de Balears como Carmen Riu, Gabriel Escarrer o Abel Matutes Prats, así como Maria Frontera, presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca.

La normativa supondrá una inversión pública de 55 millones de euros y un cambio hacia un nuevo modelo responsable laboralmente y medioambientalmente. La reforma de la ley contempla la obligatoriedad de que las camas de los hoteles sean elevables para evitar, de esta manera, las enfermedades de las camareras de pisos. Además, los establecimientos turísticos deberán contar con sistemas de ahorro de agua y deberán limitar el uso de plástico y papel. Otro de los aspectos importantes es la trazabilidad de los alimentos de las islas. Entre otras medidas, se obligará a los establecimientos a cambiar las calderas de fueloil por otras de gas natural o eléctricas, ahorrándose así 57.600 quilos de CO2 por establecimiento. Otra de las obligatoriedades, en este caso referida al agua, fijará que los establecimientos hayan de instalar sistemas de doble pulsador en las cisternas de los WC, así como dispositivos de ahorro de agua en los grifos de lavabos, bañeras y duchas. La reforma de la ley potenciará también el aprovechamiento de las aguas pluviales.

Los establecimientos turísticos deberán medir el consumo de agua o residuos, además de vigilar la temperatura, también en las zonas reservadas al personal y muy especialmente en las cocinas.
En cuanto a los residuos, la ley prohibirá el uso de amenities de un solo uso. Los hoteles deberán también sustituir el papel por códigos QR.

La intención del Govern es que el nuevo marco legal permita a Balears transformarse con el objetivo de ser un destino sostenible y circular. Armengol insistió en señalar que la sostenibilidad debe entenderse como social, económica y medioambiental. Explicó que la reforma debe mejorar la convivencia enre trabajadores, residentes y turistas y un uso más eficiente de los recursos. En definitiva, se trata de que Balears sea un destino mejor no solo para turistas, sino también para trabajadores y residentes.
La reforma de la ley recoge también la modificación total de los baremos de clasificación hotelera. Las medidas que favorecen la circularidad, el uso de energías renovables o los sistemas de optimización del consumo de energía suponen un incremento de puntuación.

REACCIONES. La presencia de hoteleros de gran peso en el sector como Carmen Riu, Gabriel Escarrer o Abel Matutes, así como de Maria Frontera, presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca, hacían pensar que el texto de la reforma de la ley había sido consensuado. Govern y hoteleros habían mantenido diversos contactos, desde la FEHM se está de acuerdo con el espíritu de la nueva ley, aunque no se conocía la letra pequeña de la ley. En este sentido, Gabriel Escarrer y Abel Matutes criticaron con dureza al Gobierno de Pedro Sánchez durante la jornada de Exceltur, pero no dudaron en mostrar su sintonía con el Govern de Francina Armengol. Escarrer, además, respecto a la obligatoriedad de cambiar todas las calderas de fueloil, aseguró que la medida no afectaría a ninguno de sus establecimientos ya que no tienen calderas de este tipo. En este sentido, la mayoría de establecimientos ya cuentan con calderas de gas o eléctricas.

En todo caso, tanto Maria Frontera como Gabriel Llobera, presidente de la Asociación de Cadenas Hoteleras, explicaron que no conocían la letra pequeña de la reforma, pero que sabían que habría fondos europeos para incidir en el camino hacia la sostenibilidad, si bien desconocían a qué se destinarían.

Fitur es el marco ideal para la confrontación política y, de forma reiterada, los partidos aprovechan su visita a la feria madrileña para criticar al rival. La expedición popular, encabezada por Marga Prohens, Llorenç Galmés y Jaime Martínez, no dudó en criticar la reforma. «Por ahora no hay ni ley ni consenso. El Govern pasa de la ley Frankestein a la ley fantasma, que nadie conoce, que nadie sabe si existe más allá de los cuatro grandes titulares, pero que nos da mucho miedo», dijo Prohens.

La delegación del PI, encabeza por su portavoz parlamentario Josep Melià, y que contó con la presencia, entre otros, de Xisca Mora, fue también crítica. «No conocemos la letra pequeña ni el contenido íntegro», explicó e incidió en la necesidad de incentivar la modernización de los establecimientos. «Debe facilitarse la modernización de los hoteles sin aumentar plazas ni alturas, y las obligaciones ambientales y laborales que se plantean deben ir acompañadas de ayudas y un plazo que permita su implantación», aseguró Melià.

La coordinadora autonómica de Ciudadanos Balears y portavoz del grupo parlamentario, Patricia Guasp, acudió acompañada de la líder estatal, Inés Arrimadas, al estand de Balears. Guasp aseguró desconocer los detalles, pero explicó que el espíritu de la reforma, por lo que han podido saber hasta ahora, no les desagrada. «A falta de conocer toda la partitura, la música suena bien, pero no conocemos la letra. Queremos que Balears sea líder en circularidad y apostamos por un crecimiento inclusivo, inteligente y sostenible», dijo Guasp.

El líder de Vox en Balears, Jorge Campos, fue muy crítico con la reforma. «Se trata de un paquete de medidas que encarecerá los servicios hoteleros y perjudicará especialmente a medianos y pequeños empresarios. Pone los pelos de punta que el Govern ultra de Armengol hable de una nueva ley turística... Lo que debemos hacer es aprobar incentivos fiscales para ayudar a ofrecer un producto competitivo y de calidad», señaló Campos.

Jordi Mora, presidente de PIMEM, recordó que desde su organización siempre se ha postulado la apuesta por el producto local y la circularidad.

El presidente de la Associació de Petits i Mitjans Hotels de Mallorca, Juan Manuel Ordinas, lamentó la falta de información. «No conocemos la letra pequeña ni aspectos tan importantes como de qué tipo de camas hablamos, la financiación o los plazos de adaptación previstos», sentenció.

La gerente de Habtur, Maria Gibert, por su parte, se mostró también crítica con la ley por la falta de información. «No se pueden hacer declaraciones de intenciones y presentaciones sin conocer el contenido y de los que van a suponer las modificaciones», dijo.

El Fòrum de la Societat Civil, por su parte, valoró positivamente que la nueva ley impulse medidas para paliar algunos de los impactos ambientales del turismo sobre las Islas, aunque tildó las medidas de insuficientes. Mantiene que el impacto del turismo de masas no desaparecerá poniendo dobles pasadores en los WC o eliminando los plásticos de un solo uso o las cartas de papel en los restaurantes.

PUNTO DE ENCUENTRO. El estand de Balears es, tradicionalmente, un punto de encuentro del sector turístico de las Islas. Evidentemente, las instituciones públicas estuvieron omnipresentes. Iago Negueruela, conseller de Model Econòmic, Treball i Turisme, prácticamente se instaló en el estand, donde mantuvo numerosas reuniones de trabajo, muchas junto a Rosana Morillo, directora general de Turisme. El Consell de Mallorca, recién asumidas las competencias de ordenación turística, mantuvo una frenética actividad. La presidenta Catalina Cladera, así como Andreu Serra, conseller insular de Transició, Turisme i Esports; Joan Gaspar Vallori, director insular de Transició i Ordenació Turística; y Lucía Escribano, directora insular de Promoció Turística, se multiplcaron durante la feria.

El Ajuntament de Palma, pese a la coincidencia con las fiestas de Sant Sebastià, desplazó hasta Fitur a Elena Navarro, concejal de Turisme, Sanitat i Consum; y a Pedro Homar, director gerente de la Fundació Turisme Palma de Mallorca 365.

Fueron numerosos, evidentemente, los hoteleros que convirtieron el estand de Balears en su segundo hogar, aunque fuera por unas horas. Los nervios por la propuesta legislativa del Govern se notaban en Maria Frontera, presidenta de la otrora poderosa Federación Empresarial Hotelera de Mallorca, y su gerente, María José Aguiló, que transitaron de reunión en reunión.

Los hoteleros Gabriel Llobera, presidente de la Agrupación de Cadenas Hoteleras y vice presidente ejecutivo de Garden Hotels; Petra Ferrer, directora comercial de Garden Hotels; Antoni Horrach, CEO de HM Hotels; Gori Bonet, presidente de la Asociación Hotelera de la Colònia de Sant Jordi; Inés Batle, presidenta de la Asociación Hotelera de Cala Millor; Xisco Fullana, director comercial de Hipotels; Pep Cañellas, propietario de Fergus Hotels; Isabel Vidal, presidenta de la Asociación de Hoteleros de la Playa de Palma; Javier Vich, presidente de la Asociación Hotelera de Palma, y Guillem Cabot y Paco Sánchez, de Cabot Hotels... fueron algunos de los que pasaron por el estand de Balears. Los hermanos Miquel y Rafel Roig, que contaban con un mostrador propio, pasaron también muchas horas en Fitur. Jaume Monserrat, consejero delegado de Dingus y presidente de Turistec, o Ramon Reus, presidente de la Agrupación Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor de Baleares (AEVAB), se dejaron ver también en el estand de Balears.

Las entidades bancarias quieren estar siempre al lado de sus clientes. CaixaBank y Banco Sabadell cuenta con un estand de Fitur, mientras que otras entidades optan por desplazar a alguno de sus ejecutivos. Ramón Juan, director general de empresas de CaixaBank; Jaume Julià, director territorial en Balears de Cajamar, que patrocina Fiturtech; Celia Torrebadella, directora territorial en Balears de Banco Santander; Rafael Ferragut, director Unidad Turismo y Ocio en Banca March; y Juan Miguel Gil Homar, director del sector turístico de Banco Sabadell en Balears, estuvieron también en Madrid.

Pilar Carbonell, exdirectora general de Turisme durante la pasada legislatura, recién incorporada a Emotion Group, mantuvo también una intensa actividad. Liderará en la isla varios, incluyendo, entre otros, la organización del ATP Mallorca Championship y el Mallorca Golf Open del World Tour.