David Baret
David Baret

Periodista

De destino a escapada

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Durante décadas Menorca fue sinónimo de destino para estancias vacacionales. Familias que pasaban una semana completa en la isla, disfrutando de un verano pausado, con las maletas llenas y el apartamento o el hotel reservado. Hoy, este patrón tradicional ha quedado para la historia, pasando a un modelo de escapadas cortas repartidas a lo largo del calendario.Este inicio de temporada se está acabando de confirmar en muchos establecimientos ya no como tendencia sino como realidad. Un fenómeno que nos acerca cada vez más a un patrón que Ibiza ya consolidó hace años.

Aunque los perfiles de visitante y los productos turísticos de ambas islas siguen siendo divergentes, la lógica de escapadas cortas, impulsadas por factores como el precio, la conectividad o las reservas de última hora, empieza a ser muy similar. En este sentido, los datos de IBESTAT confirman que la estancia media en la última década ha pasado de situarse de los 6,6 días a la media actual que sin datos en la mando, ronda los 3 o 4. Sin quizás pretenderlo, nos estamos alineando progresivamente con esta nueva forma de consumir vacaciones de la que huyen muchos destinos.

¿Y por qué huyen? Porque no es neutra en términos económicos. Las estancias cortas suponen una mayor rotación de clientes, lo que incrementa los costes operativos de los establecimientos. Más cambios de habitación, más procesos de limpieza y lavandería, más personal y mayor complejidad en la logística diaria. Además, obligan a captar un volumen mucho mayor de reservas para sostener los mismos niveles de ocupación, incrementando la dependencia de los intermediarios con los costes añadidos que ello comporta.

También el gasto complementario del visitante tiende a comprimirse. Un turista que pasaba siete días en la isla realizaba más actividades, consumía más en restauración y comercio, y repartía su gasto en el territorio de forma más amplia. Las microestancias, en cambio, concentran el gasto en pocas jornadas y limitan el margen de consumo. ¿Seremos capaces de revertir esta situación? Hasta ahora estábamos focalizados en alargar la temporada pero el nuevo reto que se presenta, todavía será mayor.