Una IA al servicio del Colegio de Ingenieros Industriales
Mateu Oliver y Jaume Vidal han fundado la empresa Lab Cima 20, que desarrolla una inteligencia artificial propia para facilitar los visados de todos los proyectos entregados
Vidal y Oliver son conscientes de que su Inteligencia Artificial debe estar en constante actualización | Foto: Aina Ambrosio
Mateu Oliver es el decano del Colegio de Ingenieros Industriales de Balears, un hombre inquieto y creativo, un emprendedor vocacional que se vuelca en todos y cada uno de sus proyectos. Habla con pasión de su trabajo, de su empresa, del Colegio de Ingenieros... Su buen amigo Jaume Vidal, que forma parte de la comisión de Inteligencia Artificial del Colegio, es un trabajador incansable, amante de la perfección y la eficiencia. Juntos, fundaron la empresa Lab Cima 20. El objetivo no es otro que desarrollar una inteligencia artificial propia. ¿Por qué? ¿Para qué?
El Colegio de Ingenieros Industriales tiene la obligación de visar todos los proyectos de los ingenieros industriales y verificar así el cumplimiento de las normas generales y específicas de aplicación, tanto si son de tipo administrativo como técnico. En este sentido, el visado garantiza que el autor del proyecto es un ingeniero industrial, con competencia en el trabajo realizado y habilitado en el ejercicio de la profesión. Además, el visado garantiza unos mínimos de calidad y seguridad, según la legislación aplicable, en beneficio de usuarios y profesionales. Finalmente, el visado del Colegio garantiza también la corrección e integridad formal de la documentación del trabajo profesional de acuerdo con la normativa aplicable.
La finalidad de la inteligencia artificial desarrollada por Oliver y Vidal es mejorar los proyectos redactados por ingenieros industriales, revisar que cumplen con toda la normativa vigente y que no hay errores de ‘picado’. En definitiva, pretenden crear un modelo de inteligencia artificial, como puede ser Chat GPT, para chequear los proyectos que entran en el Colegio de Ingenieros Industriales. «Chat GPT emplea muchas inteligencias artificiales, que se van sumando. Son privativas. Es decir, que no sabemos como están entrenadas», asegura Vidal. «Nuestra inteligencia artificial también es la suma de muchas. Nosotros nos hemos aprovechado de inteligencias artificiales open source, que nos permiten garantías de privacidad y calidad al estar sus pesos y entrenamiento disponible para su consulta», explica Oliver. «Los proyectos de ingeniería son peculiares por muchas razones. Nosotros, cuando tenemos un proyecto en cualquier tipo de formato, realizamos un diccionario y extraemos información. Nos hemos aprovechado de varias inteligencias artificiales y las hemos enganchado para que nos den el servicio que necesitamos. Nosotros, para entendernos, hemos cosido las diferentes inteligencias artificiales», continúa explicando Oliver.
El Colegio de Ingenieros Industriales de Balears ya utiliza la IA de Oliver y Vidal.
La Inteligencia Artificial es una herramienta del futuro, pero también del presente. «La IA, en general, hace cosas muy espectaculares, pero muy poco productivas. Es muy buena sacando patrones de comportamiento. La IA es una herramienta básica que bien utilizada generará una gran productividad, pero no sustituirá a las personas. Hará que nuestro trabajo sea mejor», explica Oliver. La inteligencia artificial de Lab Cima 20 está hoy especializada en los proyectos de ingeniería que el Colegio debe revisar y sellar, pero sus aplicaciones de futuro son numerosas. En todo caso, es evidente que será imprescindible continuar desarrollando el proyecto. «Nuestra IA es capaz de entender un documento técnico en cualquier formato. Extrae la documentación necesaria para proceder al visado y control del proyecto. Detectamos las incoherencias. De hecho, yo destacaría la fiabilidad de nuestra IA. Cuando escribes o interrogas a Chat GPT, por ejemplo, en ocasiones ofrece respuestas que no tienen sentido. La información que extrae nuestra inteligencia artificial está estandarizada. Es muy fiable y no se equivoca. Está especializada en proyectos de ingeniería, aunque es perfectamente extrapolable a proyectos de arquitectura o de cualquier otro tipo de ingeniería o ámbito», asegura Vidal.
Oliver continúa explicando las características de la IA creada. «La IA responde a lo que tu le hayas pedido del proyecto. No hace resúmenes. La IA es generativa. Tiene verborrea. Nuestra IA te responde a lo que preguntas. Es como si quieres sacar información de una factura para introducirlo en el programa de contabilidad… Nadie se tendrá que leer todo el proyecto. El Colegio ya emplea la Inteligencia Artificial que hemos creado. Es un éxito, puesto que todos los proyectos que se presentan necesitan el sello del Colegio. Con la IA es mucho más sencillo», señala.
La IA de Oliver y Vidal detecta también si los proyectos presentados en el Colegio cumplen con la normativa industrial vigente. «Este proyecto habla de un Real Decreto que ya no está en vigor. Lo han cambiado. Te advierte. La IA tiene el corpus normativo actualizado», manifiesta. Oliver y Vidal coinciden en señalar que uno de los problemas de las diferentes inteligencias artificiales que hay en el mercado es que ya se han topado con un muro. «Ya no hay más documentación para entrenarlas. Se han encontrado con un muro, que no permite continuar con la mejora», indica Vidal, que recuerda también el peligro de utilizar alguna inteligencia artificial. «Alguna de las IA más populares son un agujero de seguridad de gran tamaño para las empresas», indica Oliver.
El primer objetivo es asegurar que todos los documentos, por largos que puedan ser, sean revisados por la IA, que escribirá en una sola página con la información relevante. Controla así los proyectos de los ingenieros industriales de Balears. El objetivo es pasar de más de 300 páginas que puede tener un proyecto a un solo folio, que contenga la información más relevante. El proyecto es extrapolable a cualquier tipo de proyecto de otros colegios profesionales.
En todo caso, y más allá del uso para el Colegio de Ingenieros, que no es poco, la misión subyacente de la empresa Lab Cima 20 es acercar la IA a las pequeñas y medianas empresas de cualquier ámbito. «La Inteligencia Artificial es de capital importancia para el desarrollo empresarial de una sociedad. Nuestra idea es encontrar soluciones para las empresas de pequeño tamaño. En la actualidad existen islas de conocimiento, en las que cada programa resuelva una parte de un problema. Nosotros pretendemos conseguir una orquesta perfecta, que sirva para todos los retos que tiene planteadas hoy las pequeños empresas», acaba asegurando Oliver.