Decenas de miles de egipcios participaron hoy en la oración del mediodía en la plaza Tahrir, con rezos que fueron compartidos por musulmanes y cristianos, en un momento de gran emoción que no se recuerda en la historia reciente de Egipto.

El ritual, dirigido por un imán, fue seguido con gran fervor por manifestantes de la oposición que están llegando hoy masivamente a ese lugar, epicentro de las protestas contra el régimen de Hosni Mubarak.

El imán, en su sermón, pidió orar por los muertos de la revuelta popular, en un gesto que fue seguido por llantos de muchos de los participantes en el acto.

Jornada

La jornada de hoy la han catalogado del «día de la salida», que intenta resumir el deseo de manifestantes de la oposición para que este viernes se convierta en la fecha en la que deje el poder el presidente Hosni Mubarak.

Los egipcios están convocados en la plaza Tahrir, en el centro de la capital, y en otros puntos de la ciudad, al final de las oraciones del mediodía, con el fin de sumarse a las protestas contra el régimen.

La situación en El Cairo, especialmente en el centro urbano, aparece en calma, y no se tienen noticias de que se hayan vuelto a repetir los tiroteos que en la madrugada de ayer causaron cinco muertos y una docena de heridos.

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Los disparos fueron hechos por supuestos partidarios del régimen de Mubarak, al borde de la plaza Tahrir, donde hacen guardia miles de militantes de la oposición para mantener la llama de la revuelta popular que comenzó el pasado 25 de enero.

Al margen de ese tiroteo, durante la jornada del jueves se produjeron numerosos choques entre partidarios y contrarios al régimen, especialmente en los alrededores de la plaza Tahrir, que causaron tres muertos más, según fuentes oficiales.

Estos actos de violencia se producen mientras parecen haberse agotado las vías políticas, ya que la oposición se niega a conversar con el régimen mientras Mubarak sigue en el poder, a pesar de la oferta del Gobierno de iniciar un diálogo para superar la crisis.

«No encontramos ninguna utilidad a un diálogo con un régimen ilegítimo, infractor de la Constitución», señaló anoche Mohamed Mursi, portavoz de los Hermanos Musulmanes, el grupo más importante de la oposición egipcia.

El vicepresidente egipcio, Omar Suleimán, aseguró anoche que el régimen de Mubarak ha comenzado un diálogo con fuerzas políticas que no identificó, pero reconoció que grupos de la oposición están ausentes, aunque espera se unan más adelante.

Ese diálogo, añadió Suleimán, busca definir las reformas que son necesarias con vistas a las elecciones presidenciales de septiembre, a las que, según dijo el vicepresidente, no se presentará Mubarak ni su hijo menor, Gamal, favorito para sucederle.

Durante todo el día de ayer, partidarios del régimen atacaron a numerosos periodistas y muchos de ellos fueron detenidos por las fuerzas militares, en una represión sin precedentes desde que comenzaron las protestas contra Mubarak.