La canciller alemana, Angela Merkel (i), habla con el presidente francés, François Hollande, antes de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) en Bruselas. | JESCO DENZEL

Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE han discutido este jueves las condiciones de un posible rescate de España y han subrayado que están preparados para actuar si llega una solicitud y que «respetarán» la decisión que tome el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

De hecho, el presidente francés, François Hollande, ha discutido en sendas reuniones con la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro italiano, Mario Monti, cómo activar el mecanismo para mejorar la financiación de España.

Además del posible rescate de España, el enfrentamiento entre Hollande y Merkel sobre cómo resolver la crisis de deuda de la eurozona ha protagonizado la primera jornada del Consejo Europeo. El presidente francés ha dicho que la prioridad es cumplir lo acordado en junio sobre la unión bancaria y ha rechazado la propuesta de la canciller de modificar los Tratados para que la Comisión pueda vetar los presupuestos nacionales.

El Gobierno español ha justificado en las últimas semanas sus dudas a la hora de pedir el rescate en la posibilidad de que algún país de la eurozona, como Alemania, pueda oponerse. Sin embargo, en una comparecencia ante el Bundestag previa a la cumbre, Merkel ha dejado claro que la decisión corresponde exclusivamente a Rajoy.

«Es España en solitario la que debe decidir si necesita más asistencia del MEDE (mecanismo europeo de estabilidad). Lo he dejado claro en mis conversaciones con el presidente español una y otra vez», ha resaltado la canciller alemana en su discurso. Las condiciones de la nueva ayuda «están marcadas por las directrices», ha añadido.

Merkel ha asegurado que es consciente de los esfuerzos que se están pidiendo a los ciudadanos españoles y a los griegos, pero ha sostenido que ya se están viendo los primeros resultados en materia de reducción de costes laborales y recuperación de la producción. «Estos países están avanzando en la buena dirección», ha señalado, aunque ha dejado claro que todavía quedan muchas reformas por hacer.

«Es España la que debe decidirse. Pueden tomar una decisión y nosotros respetaremos esa decisión», ha resaltado por su parte el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en rueda de prensa tras la cumbre social tripartita.

«La Comisión está preparada para actuar en caso de que haya una petición, pero como ha dicho el presidente del Consejo Europeo, corresponde exclusivamente a las autoridades españolas adoptar esa decisión», ha agregado el presidente del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso.

«No hemos recibido de España ninguna petición de asistencia financiera más allá del programa de recapitalización bancaria que se está aplicando y que va en la buena dirección», ha indicado. La primera revisión trimestral del rescate bancario a cargo de la troika, ha explicado, comenzó el 15 de octubre.

Su vicepresidente y responsable de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha desvelado que el Ejecutivo comunitario está en «muy estrecho contacto con el Gobierno español desde hace ya varios meses» sobre el rescate. «Sé que el Gobierno está considerando esto --solicitar la ayuda a sus socios europeos-- con una mente abierta y nosotros estamos dispuestos a actuar si hay una petición de España», ha afirmado.

A su llegada al Consejo Europeo, el presidente francés ha explicado que tenía previsto abordar con Merkel y Monti «cómo hacer para que el mecanismo de estabilidad, que debería permitir a España ir a financiarse en buenas condiciones, se puede poner en marcha» y «cómo hacer para que los tipos de interés (de la deuda) bajen».

Hollande ya había defendido este miércoles en una entrevista que la UE debe aclarar definitivamente al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, las «condiciones precisas» que se le exigirán a cambio del rescate y pidió que no se impongan a España condiciones nuevas.

El presidente francés sostiene que se dan «todas las condiciones para salir de la crisis del euro y abrir una nueva perspectiva». «Aprovechémoslas para resolver, sobre la unión bancaria y pronto sobre España y Grecia, los problemas que afectan a la zona euro».

CALENDARIO ELECTORAL

Hollande ha pedido además que el Consejo Europeo alcance «buenas decisiones» para poner en práctica «en los plazos previstos» las decisiones adoptadas en junio sobre el Pacto por el Crecimiento y la unión bancaria. Y ha rechazado las nuevas ideas de la canciller alemana para reforzar la disciplina fiscal en la eurozona, en particular la reforma del Tratado para que Bruselas pueda vetar los presupuestos nacionales.

«El Tratado presupuestario, que acaba de ser ratificado en Francia, todavía no ha sido aprobado por todos los países. Por ello todavía no ha llegado el momento de abrir un nuevo Tratado sobre el mismo tema», ha afirmado. «De momento, el tema de este Consejo Europeo es la unión bancaria y no la unión presupuestaria», ha zanjado el presidente francés, que ha atribuido su desacuerdo con Alemania al calendario electoral.

«Nosotros acabamos de salir de unas elecciones en mayo y legislativas en junio. La señora Merkel tiene su propia cita en septiembre de 2013. Comprendo esta diferencia de calendario, pero Francia y Alemania tienen una responsabilidad común, que es sacar a la zona euro de la crisis», ha dicho.

Por su parte, Merkel ha asegurado que no habrá decisiones en la cumbre de otoño sobre la unión bancaria y ha dejado claro de nuevo que prevé retrasos en la recapitalización directa a cargo del fondo de rescate.

La canciller respalda que la ley que dará nuevos poderes al Banco Central Europeo (BCE) para controlar todas las entidades, requisito previo a la recapitalización, se apruebe antes de final de año. Pero considera que ello no es suficiente sino que se requiere una supervisión «eficaz» antes de que pueda iniciarse la recapitalización directa. «Lo digo claramente: la simple conclusión de la ley no es suficiente», ha dejado claro.

Barroso ha criticado sin citarla a Alemania por cuestionar los acuerdos de la recapitalización directa y crear así incertidumbre.

«La realidad es que algunas semanas después empezaron a extenderse algunas dudas originadas por las posiciones adoptadas por algunos Gobiernos que cuestionaron el tipo de acuerdo que se alcanzó a nivel de jefes de Estado y de Gobierno», ha criticado el presidente de la Comisión.

«Es importante que cuando se alcanza una decisión a nivel de jefes de Estado y de Gobierno, sus ministros sigan esa decisión, porque esto crea problemas de credibilidad para nuestra actuación», ha reclamado Barroso.

Los ministros de Finanzas de Alemania, Holanda y Finlandia publicaron en septiembre una declaración conjunta en la que cuestionaban tanto los plazos para la entrada en vigor de la recapitalización directa como su carácter retroactivo para España.