Los chipriotas recibieron ayer con estupor y rabia la noticia sobre la decisión tomada de madrugada por los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro de aplicar una quita a todos los depósitos privados de la isla, a cambio de un rescate financiero de 10.000 millones de euros.

El nuevo Gobierno de Nicosia aceptó el paquete de medidas impuesto por los demás socios europeos, que, entre otras imposiciones, incluye un impuesto extraordinario del 9,9 % sobre los depósitos de más de 100.000 euros y uno del 6,75 % para los inferiores.

La noticia de la quita, divulgada entre la población ya en las primeras horas de la mañana, provocó primero el estupor de los chipriotas, que con el pasar de las horas, se transformó en rabia y pánico.


Fuga de capitales

Este sentimiento se vio acrecentado por el ‘corralito’ parcial decretado por el Eurogrupo, una medida inusitada en Europa, que prohíbe toda transferencia bancaria para evitar la fuga de capitales.

En los bancos cooperativos locales, que suelen estar abiertos también en sábado, se formaron desde los primeros minutos de su apertura largas colas de clientes que solicitaban retirar sus depósitos.

Poco después, las cooperativas cerraron sus puertas, tras una decisión anunciada por el director general del Banco Central de las Cooperativas, Erotocritos Jlorakiotis, quien explicó que los bancos cooperativos quedarían cerrados debido a que la decisión del Eurogrupo tenía que ser aplicada inmediatamente.

«Tuvimos que conformarnos con la decisión», explicó Jlorakiotis, para añadir: «También nosotros necesitamos de una detallada información».

Las largas colas se formaron asimismo en los cajeros automáticos de toda la isla, con ciudadanos intentando retirar el máximo posible de sus cuentas, aunque los sistemas permiten sólo el retiro de 1.000 euros diarios.

Entre las medidas acordadas se incluye también un aumento del impuesto de sociedades del 10 % al 12,5 %.

Según explicó el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, la tasa especial sobre los depósitos permitirá aportar unos 5.800 millones de euros.