El papa Francisco, en su tercer día de pontificado, ha recibido en el Aula Pablo VI del Vaticano, a los miles de periodistas, cámaras de televisión y fotógrafos de todo el mundo que han cubierto el cónclave. | Efe

«¡Cómo me gustaría una Iglesia pobre y para los pobres!», ha exclamado el Papa Francisco durante la audiencia que ha ofrecido a los periodistas presentes en Roma en el aula Pablo VI al explicar el motivo por el que eligió el nombre de Francisco, por Francisco de Asís, un hombre, según ha dicho, de pobreza y de paz.

En ese momento, todos los presentes, profesionales de los medios de comunicación y sus familias, se han fundido en un largo aplauso.

Así, el Papa Francisco, improvisando, ha explicado cómo en el Cónclave estaba sentado al lado de su «gran amigo» el cardenal arzobispo emérito de Sao Paulo, Claudio Hummes que, «cuando la cosa se iba poniendo peligrosa, le reconfortó».

En el momento en que alcanzó los dos tercios necesarios de los votos, ha recordado que todos los cardenales aplaudieron y Hummes le abrazó, le besó y le dijo: «No te olvides de los pobres». «En relación a esto pensé en San Francisco de Asís», ha explicado a los periodistas.

Además, ha asegurado que, mientras proseguían los escrutinios, pensó también en la guerra y reflexionó sobre la figura de Francisco de Asís como «hombre de pobreza y de paz», así como un defensor de la creación, lo que le instó a decantarse por ese nombre.

Igualmente, ha comentado, entre risas, que otros cardenales le recomendaron llamarse Adriano porque Adriano VI era «el reformador» y «hace falta reformar» mientras otro le aconsejaba elegir el nombre de Clemente XV, pero Clemente XIV suprimió la Compañía de Jesús.