Uno de los fotógrafos de la agencia Reuters resultó herido por los porrazos de la policía en Kiev. | STRINGER

La oposición ucraniana reanudó su protesta proeuropeísta contra el Gobierno, en un nuevo escenario en Kiev, mientras las autoridades anunciaron que se investigará lo sucedido de madrugada, cuando fuerzas antidisturbios desalojaron violentamente a jóvenes manifestantes y registrándose decenas de heridos y detenidos.

Los principales líderes de la oposición pidieron a los ucranianos que acudan masivamente a una asamblea popular convocada para hoy, durante un mitin improvisado celebrado en la plaza Mijailovski de la capital, adonde fueron llegando miles de opositores a lo largo del día. El líder del grupo parlamentario Batkivschina, Arseni Yatseniuk, cuyo partido está encabezado por la encarcelada ex primera ministra Yulia Timoshenko, y otros dirigentes opositores se dirigieron a los congregados en la plaza Mijailovski.

El número de manifestantes, según datos de Interfax Ucrania, era a media tarde local de entre 5.000 y 7.000 personas y varios diputados opositores dijeron que se quedarán con los concentrados a pasar la noche en la plaza. Las protestas se deben a la negativa del presidente del país, Víktor Yanukóvich, de firmar un Acuerdo de Asociación con la UE ayer en Vilna.

A la calle

Timoshenko, por su parte, pidió que los ucranianos salgan a la calle y no la abandonen hasta que logren la dimisión del presidente y del Gobierno, en una carta que leyó su hija. «Después del fiasco de Vilna, nos hemos despertado en otro país. Ucrania, después de Vilna, recuerda más a Bielorrusia», señaló Yatseniuk acerca de la negativa de Yanukóvich a firmar el acuerdo en la cumbre de la UE con los países de la Asociación Oriental.

Los activistas y diputados opositores denunciaron que los antidisturbios golpearon con porras a los manifestantes, a los que arrastraron por el suelo, causando más de treinta heridos, de los que siete fueron hospitalizados. En vídeos colgados en internet por participantes en la protesta puede verse a los agentes antidisturbios, con escudos y cascos, golpear con porras a jóvenes que están tumbados en el suelo. Unos 35 manifestantes fueron detenidos por oponerse a las fuerzas antidisturbios.