El líder de las protestas, Suthep Thaugsuban, encabezando la marcha. | Nacho Jiménez

Los antigubernamentales volvieron a manifestarse ayer en las calles de Bangkok en contra del Gobierno, un día después de forzar la suspensión de las elecciones generales en 42 de las 375 circunscripciones de Tailandia.

El jefe de las protestas, Suthep Thaugsuban, viceprimer ministro del Partido Demócrata entre 2008 y 2011, reorganizó a sus seguidores en la capital, cerró campamentos y reubicó el cuartel general en el céntrico parque de Lumpini para una batalla que prevé durará meses.

«Tenemos que continuar la lucha», indicó Suthep, quien dejó en noviembre su escaño parlamentario y el Partido Demócrata para dirigir las protestas.

Miles de seguidores

El político, hijo de una rica familia del sur del país, guió a miles de seguidores de los asentamientos en el Monumento a la Victoria y de Lat Phrao hasta Lumpini.

Suthep levantó pasiones por el camino entre los forofos, armados con un simbólico silbato y la bandera nacional, y recogió las donaciones que le ofrecían los incondicionales.

«Creemos que el Gobierno interino usará más violencia contra los manifestantes en Lat Phrao y el Monumento a la Victoria. No queremos heridos, y tenemos que continuar la lucha», señaló el dirigente.

Al menos 10 personas han muerto y cerca de 600 han resultado heridas desde que los manifestantes empezaron a ocupar ministerios, el 25 de noviembre.

Suthep se mostró satisfecho por lo que consideró una victoria de la movilización antigubernamental el domingo, al obligar a la cancelación parcial o total del proceso en 18 provincias del sur del país y en cinco distritos de Bangkok.

«Estoy muy contento. Solo un 20,89 por ciento fue a votar en Bangkok. ¡Un aplauso para los bangkonianos!», destacó el veterano político, e instó a seguir con las movilizaciones.

Un grupo de manifestantes colocó ayer alambre de espino y cortó el agua y la luz en la oficina del secretario permanente del Ministerio de Defensa situada en Bangkok.