Rusia lamentó este sábado las nuevas sanciones adoptadas por la Unión Europea en represalia por la anexión de Crimea, promulgada ayer por el presidente ruso, Vladímir Putin, y se reservó el derecho a responder con reciprocidad a Bruselas.

«Es una pena que el Consejo Europeo haya tomado una decisión alejada de la realidad. Creemos que es hora de volver al terreno pragmático de la cooperación que responde a los intereses de nuestros países», dijo este sábado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Alexandr Lukashévich.

Agregó que a pesar de su voluntad de diálogo, «la parte rusa se reserva el derecho de dar una respuesta adecuada a la medida tomada» por Bruselas.

Los Veintiocho ampliaron a 33 la lista de sancionados rusos y ucranianos por la anexión de Crimea a Rusia, y pidieron que se preparen medidas de calado económico contra Moscú si continúa su avance en territorio ucraniano más allá de la península.

El Kremlin, tras la promulgación de la incorporación de Crimea y Sebastopol a Rusia, da por zanjado este proceso a pesar del vendaval de críticas de la comunidad internacional y las protestas de Ucrania, que tachan de anexión la unión de la península a la federación rusa.