El dolor presidió la despedida de Biryukov, activista en favor de Ucrania muerto el viernes en la ciudad de Odesa. | GLEB GARANICH

El secretario de Estado, John Kerry, dijo ayer que Rusia se enfrenta a sanciones sectoriales si sigue oponiéndose a permite que se den las condiciones para que el 25 de este mes se celebren elecciones presidenciales en Ucrania. «Si elementos de Rusia continúan saboteando el proceso democrático y evitan que Ucrania tenga elecciones libres y justas (...) estamos listos para implementar más sanciones», indicó Kerry en rueda de prensa conjunta con la representante de Exteriores de la UE, Catherine Ashton.

Kerry dijo que está «decepcionado» por el hecho de que Rusia no haya cumplido los compromisos «simples, sencillos y fáciles de interpretar» adoptados en Ginebra junto con Ucrania y la UE para acabar con la tensiones separatistas en el país.

Violencia

Por su parte, el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, había considerado poco antes que sería «insólito» que Ucrania celebrara elecciones el próximo día 25 mientras el Gobierno emplea al Ejército contra algunas partes de la población y no cesa esta violencia.

En declaraciones desde Viena, Lavrov defendió que el Gobierno ucraniano debe retirar al Ejército y revocar las órdenes de usar a los militares contra los ciudadanos, en referencia a la operación antiterrorista en el este contra separatistas prorrusos. Señaló que mientras haya tiros no puede haber elecciones.

Mientras, las autoridades de Kiev apostaron por continuar la ofensiva militar contra las milicias prorrusas, cuyos líderes políticos aseguran que el referéndum sobre la autonomía de la «república popular de Donetsk» del próximo domingo se celebrará «incluso en medio de los combates».

Tras la ofensiva lanzada por las fuerzas ucranianas contra Slaviansk y Kramatorsk, las milicias prorrusas dijeron ayer que ha empezado la operación contra la ciudad costera de Mariupol, también en la rebelde región de Donetsk.