Cuerpos sin vida de milicianos prorrusos se amontonan en los pasillos de un depósito de cadáveres de Donetsk. | PHOTOMIG

Los cruentos combates entre las fuerzas ucranianas y los insurgentes prorrusos continuaron ayer en la ciudad de Donetsk tras causar el lunes al menos medio centenar de muertos en las inmediaciones del aeropuerto y la estación de ferrocarril.

El alcalde de Donetsk, Alexander Lukianchenko, cifró en 40 los muertos de los combates registrados el lunes, entre ellos al menos cuatro civiles, mientras que en el depósito de cadáveres de la ciudad elevaron el balance a 45.

Rebeldes

Los rebeldes prorrusos, por su parte, informaron ayer de al menos cien muertos, o incluso 200 según algunos insurgentes, en los enfrentamientos armados de este lunes, y denunciaron que además de más de medio centenar de milicianos, las tropas ucranianas habrían matado a otros tantos civiles.

«Hemos perdido a más de 50 milicianos. Una gran parte de ellos falleció como resultado del bombardeo del ejército ucraniano contra dos camiones Kamaz que transportaban a heridos desde la zona de los combates», lamentó el primer ministro de la autoproclamada república popular de Donetsk, Alexandr Borodai.

Los civiles, según los rebeldes, habrían muerto en ataques del Ejército ucraniano en barrios residenciales, aunque sus afirmaciones no han sido confirmadas por otras fuentes.

El alcalde de Donetsk informó de que entre los 43 insurgentes heridos y trasladados al hospital hay al menos ocho ciudadanos rusos, algunos de los cuales proceden de la conflictiva Chechenia, escenario de dos crueles guerras y frecuentes atentados terroristas.