Agentes de policía vigilan en Washington la Corte Federal donde el líder terrorista, Ahmend Abu Jatala, será juzgado. Foto:REUTERS | JONATHAN ERNST

Ahmed Abu Jatala, el presunto líder del ataque contra el consulado estadounidense en Bengasi (este de Libia) de septiembre de 2012, llegó ayer a Washington para ser juzgado, con cargos que podrían suponerle la pena de muerte, informaron fuentes oficiales a varios medios estadounidenses. Después de diez días de viaje a EEUU en un buque de la Marina, Jatala llegó a la capital estadounidense entre fuertes medidas de seguridad y fue trasladado a un juzgado del tribunal federal del Distrito de Columbia, donde enfrentará el proceso judicial por el ataque, en el que murieron cuatro estadounidenses.

El sospechoso fue a trasladado a Washington en helicóptero poco después del amanecer desde el buque USS New York, en el que viajó a EEUU bajo la custodia de las autoridades estadounidenses que lo capturaron a mediados de este mes en Bengasi, durante una operación conjunta de las fuerzas especiales estadounidenses y el FBI.

FBI

Jatala, un supuesto líder regional del grupo terrorista islámico Ansar al Sharia, ha sido interrogado a bordo del buque de la Marina por funcionarios estadounidenses que afirman que ha «cooperado» con las autoridades, según informó el diario New York Times . El presunto atacante fue acusado el año pasado por el Departamento de Justicia de tres cargos, entre ellos el de matar a una persona durante un ataque a instalaciones federales de EEUU, un delito por el que puede aplicarse la pena capital.

Las autoridades no han proporcionado por el momento información sobre cuándo comenzarán las audiencias en el proceso judicial contra Jatala, a quien el Gobierno estadounidense se ha negado a trasladar a la prisión para sospechosos de terrorismo en Guantánamo (Cuba) pese a las peticiones de muchos republicanos. En el ataque del 11 de septiembre de 2012 al consulado de Bengasi fallecieron varios libios, el embajador estadounidense en Libia, Chris Stevens, el encargado de seguridad del Departamento de Estado Sean Smith; y dos empleados de la CIA, Tyrone Woods y Glen Doherty.

El presidente de EEUU, Barack Obama, calificó este mes a Jatala como «uno de los supuestos cerebros» detrás del ataque armado contra el complejo consular de Bengasi y aseguró que caerá sobre él «todo el peso del sistema de justicia estadounidense». El Departamento de Justicia ha dejado abierta la posibilidad de añadir más cargos contra Jatala, cuya detención se produjo en su propio hogar en una operación sin víctimas.