Imágenes de France 2 del lugar donde se hallan los restos del avión. | France 2

La Presidencia de Francia ha confirmado en la madrugada de este viernes que los restos del avión de Swiftair fletado por Air Algerie que desapareció este jueves tras despegar de Uagadugú han sido localizados en la región maliense de Gossi, ubicada cerca de la frontera con Burkina Faso. En él viajaban 116 personas, entre ellos los pilotos mallorquines Isabel Gost y Agustín Comerón. Por su parte, la compañía española Swiftair también ha confirmado este hallazgo a través de un comunicado, en el que ha destacado que no hay supervivientes.

«El aparato ha sido claramente identificado a pesar de que se encuentra totalmente desintegrado. Un destacamento militar francés ha sido enviado al lugar para asegurar la zona y reunir información preliminar», ha agregado la Presidencia de Francia.

El avión «se podría haber desintegrado en tierra», ya que los restos se han encontrado «concentrados», lo que significaría que no estalló en vuelo, señaló hoy el secretario de Estado francés de Transportes, Frédéric Cuvillier.

Causas

En cuanto a las causas, Swiftair señala que es "demasiado pronto para hablar sobre las causas del accidente y en este momento no podemos ofrecer información adicional". Por su parte, en una entrevista a la emisora de radio «France Info», Cuvillier subrayó que con los primeros elementos disponibles «algunas causas (del siniestro) se han descartado, en particular el lanzamiento de un misil».

El secretario de Estado, añadió que habrá que tener en cuenta, para explicar la causa de siniestro, las «muy malas» condiciones meteorológicas que se daban en la zona, y que llevaron a la tripulación a cambiar de itinerario, pero también un posible incidente técnico o una acumulación de circunstancias.

Indicó que los testigos en el punto en el que cayó el avión, en la región maliense de Gossi, cerca de la frontera con Burkina Faso, dicen que se percibe un fuerte olor a queroseno, lo que indicaría que los depósitos de combustible no se fracturaron en el aire antes de chocar contra el suelo, y que no ardieron por una eventual explosión en vuelo.

Igualmente hizo notar que aunque no se puede excluir por el momento que hubiera una bomba a bordo, se sabe que los restos del avión están «en una zona relativamente concentrada». Una alusión a que si hubiera habido una explosión en el aire, los restos estarían mucho más dispersos.

Destacamento militar

Noticias relacionadas

El responsable de Transportes se mostró convencido de que «sabremos muy rápidamente» si hubo «un problema técnico u otros elementos explicativos» que se añadan a la difícil situación meteorológica ya conocida que «es una realidad», puesto que un destacamento militar francés se dirige al punto donde se estrelló el MD-83 de la compañía española Swiftair.

Se trata de un centenar de militares con una treintena de vehículos que todavía no están allí y que tienen dificultades para acceder precisamente por las condiciones meteorológicas.

También van a trasladarse a la zona expertos del organismo oficial francés encargado de la investigación de accidentes de aviones, el BEA, y gendarmes especialistas en el transporte aéreo.

Familiares

«El presidente de la República (François Hollande) expresa toda su solidaridad a las familias y seres queridos de las víctimas», ha remachado la Presidencia a través de un comunicado.

Horas antes, el presidente de Mali, Ibrahim Boubacar Keita, había asegurado que los restos del avión de Swiftair habían sido avistados entre las ciudades de Aguelhoc y Kidal (ubicadas en el norte del país), según la agencia Reuters.

Inmediatamente después, la compañía aérea española Swiftair señaló que los equipos de búsqueda internacionales que tratan de localizar el aparato desaparecido seguían sin tener conocimiento del paradero del avión.

Los ocupantes de la aeronave eran en su mayoría pasajeros franceses (51 personas). Además, el pasaje estaba compuesto por 20 libaneses, 28 burkineses, cinco canadienses, cuatro alemanes, un luxemburgués, un suizo y seis tripulantes españolas.

El vuelo siniestrado, con código AH5017, dejó de comunicarse con las autoridades de aviación civil a las 1.55 horas GMT (3.55 hora peninsular española), 50 minutos después de haber despegado desde Uagadugú, según detalló Air Algérie en un comunicado.