El primer ministro farncés Manuel Valls durante el debate para extender el estado de emergencia. Foto: CHARLES PLATIAU

El primer ministro francés, Manuel Valls, subrayó este jueves que no se puede descartar que otros grupos ligados a los atentados yihadistas del 13-N en París sigan activos y advirtió de que la amenaza terrorista va a ser «duradera».

«No sabemos si hay otros grupos de individuos, grupos de guerra, directamente vinculados a los ataques del viernes. Podemos imaginarlo. La amenaza va a ser duradera y permanente», indicó Valls en la cadena «France 2», al tiempo que señaló que decir que no hay riesgo «sería mentir a los franceses».

El jefe del Ejecutivo subrayó que la neutralización este miércoles en Saint Denis de un comando yihadista preparado para atentar, en el que falleció el belga Abdelhamid Abaaoud, que tuvo un papel determinante en esos ataques, no implica que el peligro haya cesado.

Valls admitió que no se sabe cómo Abaaoud llegó a Francia, pero subrayó que no considera que los servicios de información hayan «fallado».

«Desgraciadamente son individuos experimentados que evitan a la Policía. Esos terroristas se esconden, no se comunican con el tipo de teléfono que nosotros tenemos», añadió el político socialista en el telediario de máxima audiencia de esa cadena.

El primer ministro destacó que los atentados del viernes, en los que murieron al menos 129 personas, «fueron preparados metódicamente desde Siria y Bélgica», y subrayó la necesidad de perseguir a todos aquellos individuos «que representen un verdadero peligro».

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«Puede que algunas de esas personas se aprovecharan de la crisis de refugiados. Algunos estaban ya en Europa», afirmó Valls, que recalcó que «hace falta que cada uno en Europa asuma sus responsabilidades» para que se efectúen controles en las fronteras.

El titular del Gobierno abogó por «reforzar la cooperación entre los países europeos» y señaló que «no hay fronteras herméticas» y que, aunque el Tratado de Schengen será cuestionado si cada uno no afronta esas responsabilidades, Francia también fue golpeada por atentados cuando ese acuerdo no existía.

Valls apuntó que su país sí ha aprendido la lección de los atentados del pasado enero contra «Charlie Hebdo», como lo demuestra el hecho, en su opinión, de haber creado la ley que da cobertura a la acción de los servicios secretos o el reciente proyecto de ley para ampliar la duración del estado de emergencia.

Advirtió, sin embargo, de la complejidad de la amenaza: «Hacemos frente a una guerra nueva, no convencional. Individuos aislados pueden atacar con un cuchillo, pero sabemos también que el Estado Islámico ha usado armas bacteriológicas en Siria».

Valls precisó que «no hay un indicio particular» sobre el riesgo de ese tipo de ataques, pero insistió en que esa organización «puede utilizar todo tipo de armas», razón por la cual hay que estar preparados.

«Esta guerra va a ser larga. Debemos darnos los medios para ganarla», concluyó el primer ministro, según el cual desde los atentados del pasado viernes policías y gendarmes han efectuado 600 registros.