Miles de centroamericanos retoman su marcha por México hacia EEUU. | REUTERS / CARLOS GARCIA RAWLINS

Miles de migrantes centroamericanos que buscan llegar a Estados Unidos han retomado este sábado su larga caminata rumbo al norte de México, en momentos en los que el presidente estadounidense, Donald Trump, ha endurecido las políticas migratorias de su país para frenarles el paso.

Trump firmó este viernes un decreto que suspenderá por hasta 90 días la concesión de asilo a los inmigrantes indocumentados que crucen la frontera desde México, mientras que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha llamado a garantizar la protección de los que huyen de la violencia o la persecución.

«Estas políticas de Estados Unidos dejan a los migrantes aún más vulnerables, pues quedarán varados en el norte de México, al acecho de traficantes de personas, al no tener el Gobierno mexicano capacidad para ayudarles», he señalado el investigador sobre asuntos migratorios del Colegio de la Frontera Norte (Colef), Oscar Misael Hernández.

Las imágenes de televisión y publicadas en las redes sociales muestran a miles de personas con mochilas, comida, algunos subiendo a la parte trasera de camiones de carga con sus hijos de la mano para retomar su rumbo a Estados Unidos, tras haber permanecido cuatro días en Ciudad de México, en el centro del país.

A otros, en tanto, se les observaba pidiendo ayuda a conductores en las carreteras que se encuentran las afueras de la ciudad, ya que tendrán que recorrer entre 1.000 y casi 3.000 kilómetros más para llegar a diferentes puntos de la frontera con Estados Unidos.

Según representantes de diversas casas de migrantes en el norte de México consultados por Reuters, algunos llegarán este lunes a Tijuana y durante la semana a otras ciudades fronterizas, como Reynosa.
Miles de migrantes centroamericanos emprendieron una multitudinaria caravana el mes pasado, huyendo de la violencia y la pobreza, a la que se fueron sumando cientos de personas.
Desde el inicio de este inédito «éxodo de migrantes», como lo han llamado especialistas, el Gobierno mexicano ha ofrecido refugio a algunos mientras que una minoría ha optado por volver a su país de origen, principalmente Honduras.