La Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGS) del Ministerio de Economía y Hacienda disolvió con carácter inmediato Seguros Mercurio, la aseguradora del Grupo Marsans, del que son copropietarios el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y Gonzalo Pascual, ante su grave situación patrimonial y de liquidez, con el fin de proteger los intereses y derechos de los asegurados..

«Con el fin de proteger los intereses de los asegurados y terceros perjudicados, y garantizar un procedimiento ordenado de liquidación, se ha encargado la liquidación de la entidad al Consorcio de Compensación de Seguros (CCS)», indicó el Ministerio de Economía. El CCS tratará de buscar soluciones en el mercado para salvaguardar los intereses de los asegurados y la plantilla.

Según Seguros, los datos de tesorería facilitados por la propia compañía reflejaron que, de no procederse a esta actuación del supervisor, la entidad no podría cumplir sus compromisos de pago en la próximas semanas. A la vista de esta situación, y tras numerosas reuniones mantenidas en la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones en los últimos meses con los accionistas de la entidad, Economía consideró que la disolución «es la única alternativa».

En este sentido, la DGS concretó que en esas reuniones los accionistas no aportaron soluciones viables para restablecer la situación patrimonial, y que la disolución vino avalada por la inminente falta de liquidez en la que se encuentra la entidad. Igualmente, la DGS revocó la autorización administrativa concedida a Seguros Mercurio para ejercer la actividad aseguradora privad, centrada en el sector de transporte por carretera, tanto de lo viajeros como de la mercancías, desde su nacimiento en 1987.

Según la web de Seguros Mercurio, la compañía se adapta a las necesidades del cliente, creando un producto a medida para los asegurados, y es líder en el transporte de viajeros, con una cuota de mercado del 30%.

En su último informe de gestión disponible, del ejercicio cerrado en 2007, Seguros Mercurio sostuvo que genera «suficiente liquidez para cumplir las necesidades de la operativa de negocio». Asimismo, indicó que «dada la estructura y característica de la cartera de valores de la entidad se puede cumplir que no existe riesgo financiero significativo relacionado con la gestión y operativa de la misma».

Los problemas del grupo Marsans

Con esta disolución se agravan los problemas del Grupo Marsans, en el que, tras la quiebra de Air Comet, las miradas están puestas ahora en Viajes Marsans, cuyos mandos asumió personalmente, Gonzalo Pascual, tras la dimisión de su director general, José María Lucas, y el cese de varios consejeros.

El grupo turístico, está inmerso con su bancos acreedores, entre los que se encuentran Santander, Sabadell, Caja Madrid, la Caixa y Banesto, en la refinanciación de una deuda de 120 millones, y en la firma de un crédito de 40 millones adicionales que no acaba de materializarse, para mantener su actividad. Solo Air Comet debe cerca de 150 millones a otras empresas del Grupo Marsans y 160 millones de euros a terceros.

Díaz Ferrán y Pasqual podrían estar estudiando «dos o más ofertas» para la venta del Grupo Marsans, entre ellas las de dos fondos europeos, según fuentes próximas a la operación. No obstante, fuentes de Marsans señalaron que «no tienen referencia» del interés ni procedencia de éstos por el momento.

Precisamente desde este lunes, Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, figuran como administradores solidarios de Air Comet, tras el cese de varios consejeros delegados de la aerolínea, según recoge el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme)