El líder del PP, Mariano Rajoy, aseguró ayer que el objetivo prioritario de España en este momento es «recuperar la confianza dentro y fuera» y crear empleo, y añadió que para ello es necesario «un plan ordenado» que fije un «rumbo cierto» y «acabe con los bandazos» del Gobierno socialista. Según precisó, ese plan debe incluir medidas como una reforma «en profundidad» del sector público, una rebaja selectiva de impuestos o una reforma de la Ley de Estabilidad Presupuestaria que «prohíba el déficit» y fije techos de gasto y endeudamiento de las administraciones públicas.
Rajoy planteó estas propuestas durante la clausura del Congreso de la Empresa Familiar de Madrid, en la Real Casa de Correos, a la que asistió la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y numerosos empresarios.
Contra los «bandazos»
Según el presidente de PP, el objetivo «prioritario» es «recuperar la confianza dentro y fuera» de España, algo que, a su entender, requiere «un plan ordenado, coherente, sistemático, que fije objetivos y establezca un rumbo cierto». «En suma, que dé certidumbre y ayude a recuperar la confianza», enfatizó, para añadir que «no hay nada peor que los bandazos».
«Mi tarea y obligación es presionar al Gobierno para que lo tome en serio y tome decisiones porque el tiempo corre en nuestra contra», avisó, y señaló que éstas son medidas «urgentes» en España, que «requieren ganas, ilusión, determinación y coraje». A su juicio, los emprendedores han demostrado «con creces que estaban a la altura de la circunstancias» pero otros, «a la vista de sus antecedentes», «no están en condiciones de hacer» estas reformas que necesita España.