La ministra Rosa Aguilar, durante la reunión de ayer en la sede del Ministerio. | Maria Nadal

La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, acordó ayer con las comunidades autónomas y el sector agrario una posición común en la que muestran su «rechazo pleno» y piden la retirada de la propuesta de Bruselas para reformar la Política Agrícola Común (PAC).

Aguilar declaró que España defenderá esa postura común en el próximo Consejo de Agricultura de la Unión Europea (UE), el jueves en Luxemburgo, en el que arrancarán las negociaciones sobre el texto de la reforma de la PAC.

Reivindicaciones

El Gobierno y las autonomías reivindican que no haya proyecto sobre el futuro de la PAC hasta que no se sepa el presupuesto para la agricultura más allá de 2014; rechazan, entre otros aspectos, la «tarifa plana» que pretende aplicar Bruselas en la concesión de las subvenciones, y solicitan medidas adecuadas de gestión de los mercados.

Aguilar detalló que en el próximo Consejo de Ministros plantearán al comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, que la propuesta de reforma actual «no vale», porque «afecta gravemente a la agricultura productiva» española y europea, y que lo harán con una «voz unánime y potente».

La ministra defendió que España no aceptará «ni un solo paso atrás» en cuanto a la ficha financiera que recibe actualmente e incluso se que quiere «ir a más», y que ya está trabajando con países como Francia, Alemania, Italia o Grecia en una estrategia europea frente a la reforma.

Respecto a la sustitución de los pagos directos por una «tasa plana», afirmó que rechazarán «con total rotundidad» este cambio, porque «es un disparate» y es «insostenible» al «no tener en cuenta» la agricultura mediterránea «diversa».

En el documento abogan por la simplificación de la propuesta, la preferencia comunitaria y la reciprocidad en las relaciones comerciales.

Sobre los mecanismos de gestión de mercados, detalló que «no son suficientes» en un contexto de volatilidad de precios».