El jueves, las malas noticias económicas llegaban desde todos los ámbitos. Las dudas sobre la solvencia de la banca provocaron un gran nerviosismo entre los inversores que terminó por afectar a todos los mercados. En el de deuda, la prima de riesgo volvió a dispararse hasta casi los 380 puntos después de varios días de relativa tranquilidad. La inquietud se notaba también en las Bolsas, que sufrieron un desplome generalizado con los selectivos de Italia y España a la cabeza. Mientras, en el mercado de divisas, el euro marcó los 1,2779 dólares, el peor cambio frente al 'billete verde' desde septiembre de 2010.

El aumento de la prima de riesgo -la diferencia de la deuda española respecto al bono alemán- hasta los 377 puntos, 16 más que el miércoles, hacía saltar todas las alarmas. Los inversores vieron en ese incremento un posible rebrote de las tensiones en los mercados, que tantos quebraderos de cabeza dieron en los días previos a las Elecciones Generales. Esa semana, el diferencial llegó a rozar los 500 puntos básicos, la cifra que precipitó los rescates de Grecia, Irlanda y Portugal.

La que sí superó ese umbral fue la prima italiana, y este jueves, recuperó esos niveles al alcanzar los 520 puntos. Una escalada que se vio reflejada en las Bolsas.

Y es que este rebrote de la presión en el mercado de deuda, después de varias semanas de poco movimiento, se contagió inmediatamente a las plazas europeas. Todas terminaron la sesión en rojo, con Italia y España a la cabeza.

La Bolsa de Milán lideró las pérdidas al marcar un -3,7% al cierre de la sesión. Mientras, el Ibex 35 retrocedía un 2,94% y se alejaba nuevamente de los 8.400 puntos, al encadenar dos días de pérdidas consecutivos. Es la mayor caída en casi cuatro semanas.

La jornada negra en los mercados coincidía con el tercer Consejo de Ministros del Gobierno de Rajoy, en el que se aprobaron nuevas medidas para garantizar el objetivo de déficit exigido por la Unión Europea. La vicepresidenta y portavoz, Soraya Saénz de Santamaría, anunció en una rueda de prensa posterior que habrá un plan contra el fraude fiscal, con el que se lograrán más de 8.000 millones de euros.

Los expertos, sin embargo, no creen que estas medidas sean la principal causa de los malos datos económicos. Ya el pasado viernes, el Gobierno anunció una inesperada subida de impuestos y no se produjo ninguna reacción negativa por parte de los inversores.

La que es, para la mayoría de los analistas, la principal causa de esta jornada negra es la previsión del Gobierno de Rajoy sobre el sector financiero español. El Ejecutivo cifró en 50.000 millones de euros las provisiones necesarias para la banca, lo que ha suscitado dudas entre los inversores. Precisamente, los grandes valores del sector financiero fueron dos de los más perjudicados. BBVA perdió un 5,03% y Santander, un 4,51.

Fue, sin embargo, Mediaset la que encabezó los recortes con una pérdida del 6,69%. Otros grandes del índice, como Telefónica o Repsol YPF, cayeron un 2,24% y un 2,90% respectivamente.

El gran estreno de Día

Tan sólo Acerinox, Arcelormittal y Día lograron esquivar el rojo. Este último, obtenía un buen resultado (+2,19%) coincidiendo con su debut en el selectivo.

El grupo de supermercados se estrenó en el parqué madrileño el pasado julio, en el marco de la operación de segregación de la empresa del grupo francés Carrefour. No fue, sin embargo, hasta este lunes cuando se incorporó al selectivo español.

Los inversores premiaron los buenos resultados del grupo dirigido por Ricardo Currás que, al cierre del tercer trimestre, obtuvo un beneficio neto de 32,4 millones de euros, lo que supone multiplicar por siete el logrado durante el mismo periodo de 2010.

Así, las acciones de la cadena de distribución cerraron el jueves a un precio de 3,64 euros, el valor máximo desde su debut bursátil en julio. En concreto, se intercambiaron un total de 6,84 millones de títulos del grupo. La excepción de una jornada negra.

Pesimismo en el viejo continente

El selectivo español no fue el único afectado durante la sesión del jueves. Tras Milán y Madrid, se situó Lisboa, con una pérdida de su valor del 1,7%. París, Londres y Franfort se sumaban al color rojo, al retroceder un 1,4%, un 0,8% y un 0,2% respectivamente.

El analista de XTB, Pablo del Barrio, apuntó como otra de las causas al desplome de los títulos de UniCredit, tras anunciar que la ampliación de capital de 7.500 millones para reforzar su solvencia se efectuará con un descuento de hasta el 43%.

«Es un círculo vicioso que es muy difícil de compensar con algún que otro dato macroeconómico positivo», aseguró en declaraciones a Europa Press. A su juicio, los inversores temen que la banca europea no pueda afrontar los requisitos de capital exigidos por la Autoridad Bancaria Europea (EBA) antes de junio de este año.

La falta de confianza también parecía dirigirse a la moneda única. El euro bajó posiciones al marcar un mínimo intradiario de 1,2779 dólares, el peor cambio registrado desde septiembre de 2010. De este modo, la cotización del euro frente al dólar registraba, en apenas una sola sesión, una depreciación del 1,3%, tras haber iniciado la sesión en los 1,2944 dólares.

Para Pablo del Barrio, este desplome se puede deber a la crisis de Irán y su impacto en el precio del petróleo que, en definitiva, denotan una «aversión al riesgo». Y en este contexto, el dólar se hace valer como uno de los activos más seguros.