El Rey, junto al Príncipe y Rajoy, posa con los 19 mandatarios de comunidades y ciudades autónomas, en la foto de familia de la V Conferencia de Presidentes que se celebró en el Senado.

El Gobierno y las comunidades autónomas han alcanzado un acuerdo por unanimidad para reducir el déficit, cumplir los compromisos adquiridos con Bruselas y enviar un mensaje de unidad a la Unión Europea y a los mercados con el fin de recuperar la confianza en la economía española.

El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, ha mostrado su satisfacción al concluir la V Conferencia de Presidentes, la primera cumbre de este tipo que presidía y que, como ha subrayado, se ha centrado en los problemas «importantes» del país, dejando de lado el debate sobre el modelo de Estado.

«No era fácil llegar a un entendimiento, pero España da un buen mensaje», ha subrayado Rajoy, quien ha recordado que en la reunión había líderes con diferentes sensibilidades incluso dentro de un mismo partido. Todos los presidentes autonómicos han cuestionado que, después de que Bruselas rebajara el objetivo de déficit para España hasta el 6,3 por ciento del PIB, se haya mantenido en el 1,5 el objetivo de las comunidades, pero han aceptado que no se revise ese reparto hasta el año que viene, con vistas a aplicarla en 2014.

También ha habido críticas al modelo de financiación, pero en el documento aprobado se afirma que se evaluará en los plazos que marca la ley y que estudiará el sistema el Consejo de Política Fiscal y Financiera. El sistema, ha señalado la presidenta castellanomanchega, María Dolores de Cospedal, «no es bueno» y es necesario evaluar cómo influye en él la crisis, aunque no se requiere un cambio «inmediato».

Confianza

Con el acuerdo alcanzado ayer, según Rajoy, España ha demostrado que, a pesar de ser un país muy descentralizado, está comprometida con la consolidación fiscal como elemento «imprescindible para recuperar la confianza» en su economía y asegurar la financiación de las políticas sociales y los servicios públicos, como reza el texto del acuerdo.

Cumplir el déficit será difícil porque continúa la recesión y la financiación sigue cara, pero Rajoy se ha mostrado convencido de que todas las administraciones harán todo lo posible por lograrlo. El jefe del Ejecutivo ha reconocido que persisten las diferencias en torno a las políticas para cumplir los compromisos adquiridos con Bruselas, y así lo han puesto de manifiesto el presdiente de Catalunya y los presidentes socialistas de Andalucía y el País Vasco.

El lehendakari, Patxi López, ha considerado que el documento aprobado es «bueno para el conjunto del país» y demuestra un ejercicio de responsabilidad», pero «no oculta discrepancias absolutas y radicales con la política de recortes».

El presidente andaluz, José Antonio Griñán, ha mostrado sus discrepancias con el Gobierno en la aplicación de la redistribución del déficit, que, a su juicio, podría aplicarse ya y no en 2014.