La Ejecutiva Federal del PSOE ha rechazado la dimisión del secretario de Organización, Óscar López, por la gestión de la moción de censura aprobada en Ponferrada (León) con el voto de un condenado por acoso sexual.

El propio López ha comparecido en rueda de prensa posteriormente para explicar que ha puesto su cargo a disposición de sus compañeros por el «error de apreciación» cometido al autorizar esa moción aprobada el pasado viernes y que causó un gran malestar en las filas socialistas.

Sin embargo, la Ejecutiva Federal -sólo se ha reunido la Comisión Permanente, de la que forman parte algo más de una docena de dirigentes- le ha mostrado su apoyo y le ha pedido que continúe en el puesto, un respaldo que, según ha dicho, es suficiente como para que haya aceptado continuar.

Explicaciones

El presidente del PSOE, José Antonio Griñán, que no ha asistido a esa reunión, ha pedido en Sevilla explicaciones a los responsables de organización del partido y se ha preguntado por qué no se avisó desde el primer momento de lo que iba a ocurrir. Aunque en todo momento López ha asumido en primera persona la equivocación de autorizar esta moción y ha exculpado al líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha insinuado que ha habido «una serie de errores en cadena» de distintos órganos y a diferentes niveles, pero Rubalcaba «no conocía los pormenores de la moción de censura».

Según ha subrayado, en la reunión ha asumido su «error», ha pedido disculpas y ha dicho que se ha rectificado, ya que el nuevo alcalde, Samuel Folgueral, ha optado por dejar de ser militante socialista, por lo que el PSOE no gobernará en Ponferrada.

Eso cumple, ha señalado, con las instrucciones que había dado Rubalcaba a última hora del pasado viernes, cuando ordenó a Folgueral que renunciara a la Alcaldía o que dejara el partido. Finalmente, Folgueral optó ayer por mantener su puesto y anunció su baja de militancia.