El ministro de Interior, Fernández Díaz (i); el ministro de Exteriores, García-Margallo (d); y el abogado Miquel Roca, en Barcelona. | TONI ALBIR

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha calificado de «perfectamente previsible» la respuesta del presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, a la carta del presidente catalán, Artur Mas, al que Margallo ha avisado que «pedir lo imposible es altamente peligroso». Margallo ha intervenido en el Barcelona Tribuna, cuya presentación ha corrido a cargo del exdiputado de CiU Miquel Roca, con la asistencia del ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz.

En el turno de preguntas, la presidenta de la asociación Òmnium Cultural, Muriel Casals, le ha preguntado si «no era lógico que los catalanes reaccionaran pidiendo el ejercicio del derecho a decidir» y si «una buena manera de abordar la cuestión era dejándoles votar».

Prejuicio

«En la política y la vida -ha contestado Margallo-, lo único por lo que no se puede actuar es por prejuicios. En política, pedir lo posible es sensato, pedir lo probable es temerario y pedir lo imposible es altamente peligroso». El dirigente ha recalcado que «el diálogo hay que hacerlo dentro de lo que es posible, dentro del respeto a la norma. Fuera de la legalidad no se puede discutir nada».

Por otra parte, el presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, ha asegurado ante el Comité Ejecutivo Nacional de su partido que Artur Mas tiene perdida la batalla internacional que acaba de plantear con el envío de cartas a distintos líderes exponiendo sus planes independentistas. Según ha dicho, con esa actitud cae en el «ridículo», según han explicado fuentes 'populares'.

En esta reunión del PP a puerta cerrada, el jefe del Ejecutivo ha indicado una vez más que no habrá consulta porque es inconstitucional y porque él no puede autorizarla.