Ada Colau (c), durante el encuentro que miembros de la PAH de toda España han mantenido en Barcelona . | Toni Albir

Cerca de 500 miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de toda España se han reunido en Barcelona para conmemorar el quinto aniversario de un movimiento que se pone, como reto de futuro, presionar a las administraciones locales para que protejan el «derecho a una vivienda digna».

Conscientes de la «dificultad» de conseguir cambios en la legislación estatal, las más de 200 asociaciones que se han constituido en España buscan «interpelar» a las Comunidades Autónomas y a los ayuntamientos para responder a una situación que califican de «emergencia» social.

«El Gobierno del PP se ha sacado la careta y se ha convertido en el gobierno de la banca. Ha desoído un clamor popular. Frente a ese bloqueo, estamos interpelando mucho más a los gobiernos de las Comunidades Autónomas, así como a los ayuntamientos», ha explicado Ada Colau, portavoz de la PAH de Barcelona y una de las caras más visibles del movimiento. Acompañada por cerca de 500 representantes de un centenar de asociaciones estatales, Colau ha admitido que hace cinco años era imposible pensar que serían capaces de paralizar más de un millar de desahucios, obtener miles de daciones en pago y realojar a más de 1.000 personas en la obra social del movimiento.

«Estamos muy emocionados. Era imposible imaginar que podríamos llegar hasta aquí. Queremos dar un mensaje de que el ciudadano tiene mucho más poder de lo que se cree.

Si persistimos y nos organizamos, la ciudadanía tiene mucha más capacidad de incidencia y de organización», ha resaltado Colau. La voz más visible del movimiento, nacida en Barcelona hace un lustro, ha hecho estas declaraciones antes de la celebración de una multitudinaria asamblea que se ha celebrado en el Centro Cívico 'La Báscula' de la capital catalana.