GRA86. VITORIA, 02/05/2014.- Fotografía facilitada por la Lehendakaritza de su titular Iñigo Urkullu (i), junto al presidente de la Generalitat, Artur Mas, antes de la reunión que mantuvieron ayer en el Palacio de Ajuria Enea, la residencia oficial del lehendakari, en la que analizaron la situación política, económica y social de Cataluña y de Euskadi. EFE/Jon Bernardez | Jon Bernardez

El lehendakari, Iñigo Urkullu, y el presidente de la Generalitat, Artur Mas, mantuvieron el jueves una reunión de trabajo en Vitoria, de la que nada se supo hasta ayer cuando se difundieron imágenes del inicio del encuentro a las televisiones de ámbito nacional, en la que entre otras cuestiones analizaron «las dificultades de avanzar en el autogobierno ante la estrategia de recentralización del Gobierno español», según los comunicados de los gobiernos de ambas comunidades autónomas.

El encuentro, en el Palacio de Ajuria Enea, duró dos horas y media, y los presidentes estudiaron la situación de ambas comunidades, en el Estado español y en Europa, informó ayer la Presidencia del Gobierno vasco en un comunicado. La Generalitat informó por su parte de que Mas detalló al lehendakari la situación del ‘proceso soberanista’ en Catalunya, así como la evolución que prevé que pueda tener en los próximos meses.

Intereses comunes

En cuanro a los ‘matices’ de las notas oficiales, según la de Ajuria Enea tanto Mas como Urkullu acordaron seguir manteniendo una relación «periódica y fluida» para abordar conjuntamente las materias de interés común para ambas Comunidades, así como para «profundizar en el conocimiento de las realidades propias de Catalunya y Euskadi, con sus similitudes y sus diferencias».

En la nota de la Generalitat se señala que las situaciones de Catalunya y Euskadi «guardan similitudes pero también diferencias», y compararon «cómo son las relaciones que mantienen con las instituciones del Estado, con PP y PSOE y con las instituciones europeas».

Durante el encuentro Urkullu y Mas «compartieron su diagnóstico ante la crisis económica» y la estrategia para avanzar «en el objetivo prioritario de la competitividad de ambas comunidades así como de las necesidades en la cohesión social», según se especifica en la nota del Gobierno Vasco.