Iberia ha llegado a un acuerdo con los representantes de sus trabajadores sobre un nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que tiene carácter voluntario para ambas partes, al que podrán acogerse hasta un máximo de 1.427 trabajadores y que afectará a los colectivos de tierra y pilotos.

Este ERE tendrá validez hasta el 31 de diciembre de 2017 e incluye las fórmulas de prejubilaciones, bajas incentivadas, reducciones de jornada y recolocaciones diferidas para los trabajadores de los colectivos de tierra y pilotos que quieran acogerse a ellas.

El colectivo de tripulantes de cabina, no se verá afectado por este nuevo ERE voluntario.

La posibilidad de establecer un nuevo ERE -que ahora se acaba de formalizar- fue discutida como parte de las negociaciones de los convenios que Iberia cerró con sus distintos colectivos en marzo y abril de este mismo año.

Todo ello ha sido posible gracias al consenso entre Iberia y sus representantes sindicales, sobre la necesidad de continuar con la reestructuración de la compañía para que sea «eficiente y competitiva» y que pueda crecer en el futuro de forma rentable y sostenible.

A diciembre de 2013, la plantilla de la compañía era de 18.103 empleados, 4.651 de vuelo y 13.452 de tierra.