La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha expresado este miércoles el pésame del Ejecutivo por el fallecimiento del presidente de Banco de Santander, Emilio Botín, que supone, a su juicio, una pérdida para España.

En declaraciones en los pasillos del Congreso antes del arranque de la primera sesión de control al Gobierno del nuevo curso político, Sáenz de Santamaría ha enviado un mensaje de apoyo a la familia del banquero y a los trabajadores de su entidad.

También ha hecho hincapié en que fallece una de las personas más importantes del sistema financiero español y «comprometida con su país», con cuya carrera al frente del Banco de Santander ha contribuido a la «Marca España» y a colocarla como una «referencia de calidad».