La candidata de Ciudadanos a la presidencia de la Generalitat, Inés Arrimadas, y el presidente del partido, Albert Rivera. | TONI ALBIR

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha mostrado su deseo por trabajar «desde ya» para reformar España, no para contentar al líder de ERC, Oriol Junqueras, sino para «reenganchar» a muchos catalanes, los que apuestan por la independencia, al proyecto común español.

En declaraciones a RNE, Rivera ha asegurado que en Catalunya existe un bloqueo institucional porque Artur Mas no puede ser presidente al no tener la mayoría y habrá que esperar si esa «amalgama» de CiU, ERC, CUP, Omniun Cultural son capaces de encontrar un «candidato alternativo».

En declaraciones a RNE, Rivera ha destacado la dificultad de que tres partidos políticos y dos plataformas civiles se pongan de acuerdo para buscar un candidato que tenga que formar gobierno y gobernar, porque esa «amalgama» lo único que tenía en común era declarar la independencia y como no han ganado existe un «bloqueo institucional».

Rivera, que ha considerado necesario trabajar para que «poco a poco» los que han votado a Junts pel Sí y a las CUP se vuelvan a reenganchar al proyecto común español, se ha referido a la candidatura de Podemos e ICV en Cataluña, Catalunya Sí que es Pot de quien ha dicho que «parte del batacazo electoral en las elecciones ha sido por apostar por un candidato independentista».

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Tras asegurar que Ciudadanos sabe ganar a Podemos en las urnas y además suma tantos escaños como el PP y el PSC juntos, Rivera ha recordado que considera que el peor rival para el PP son ellos mismos.

Ha asegurado que Ciudadanos ha demostrado que con un proyecto alternativo al independentismo ha conseguido mucho más que aquellos que tan sólo se amparaban en el estado de derecho, porque aunque sea fundamental ha recordado que en un proyecto político hay que hablar de sanidad, de justicia o de economía.

Preguntado por las críticas del expresidente del Gobierno José María Aznar a la dirección del PP por los reveses electorales, Rivera ha dicho que bastante tiene con presidir su partido como para meterse en «casa de los demás» y ha vuelto a insistir en que el propio enemigo de Rajoy y del PP son ellos mismos, y los errores que cometen o los silencios que guardan.

Respecto a si se ve presidente del Gobierno, Rivera ha señalado que «quien gobierne en España va a gobernar en minoría» pero ha subrayado que su partido es «fundamental» en ese papel de diálogo.

Ha añadido que desde los extremos va a ser complicado liderar esta etapa, mientras que desde el centro ha considerado que será más sencillo.