La presidenta del Banco de Santander, Ana Botín, durante la presentación de resultados del grupo que obtuvo un beneficio neto atribuido de 5.966 millones de euros en 2015, el 2,6 % más que el año anterior, después de la dotación a provisiones, sin las cuales las ganancias habrían crecido el 13 % y habrían alcanzado los 6.566 millones. | Efe

La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, ha reconocido públicamente que hasta este miércoles su banco principal no era el Santander porque no tenía en él domiciliados sus principales recibos, lo que pasa con muchos clientes de la entidad.

Por eso, ha insistido, el Banco Santander lanzó en España la Estrategia 1/2/3 con el objetivo de que los clientes se sumen a una cuenta que les premia con acciones y les bonifica por el pago de los recibos, lo que le ha permitido sumar 860.000 clientes en siete meses.

De todos ellos, 237.000 han llegado al Banco Santander con su nómina directamente desde otra entidad, ha añadido el responsable del negocio en España, Rami Aboukhair.

Los objetivos del Banco Santander, ha explicado Botín, es que se sigan uniendo cada vez más clientes hasta llegar a los dos millones a cierre de 2016 porque los más vinculados con la entidad, es decir, aquellos que tienen domiciliada su nómina y principales recibos, acaban siendo los más rentables.

Sin embargo, ha desvelado que hasta hace muy poco ella misma no tenía sus principales recibos en el Banco Santander y aunque abrió una cuenta 1/2/3 en octubre, hasta este miércoles no ha empezado a beneficiarse de sus numerosas ventajas.

«Espero que a partir de ahora me den una acción, dos o las que me corresponda», ha bromeado mientras miraba de soslayo al consejero delegado del grupo, José Antonio Álvarez, que escuchaba con cierto asombro las declaraciones.