El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, clausuró este sábado la XXXXII Reunión del Circulo de Economía que se celebra de Sitges. | Efe

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido este sábado que después de las elecciones del 26 de junio prospere su idea de un pacto de su partido con el PSOE en vez de que gobierne el PP en minoría porque está convencido de que es lo que más le conviene a España.

Rajoy ha clausurado las jornadas organizadas en Sitges por el Círculo de Economía, y ante el panorama que pueden dejar las urnas dentro de un mes ha subrayado que él no prevé cambiar el planteamiento que hizo tras los comicios del 20 de diciembre.

El presidente del Círculo de Economía, Antón Costas, ha expuesto a Rajoy la propuesta de esta organización de que si no es posible un acuerdo entre los partidos tras las elecciones, se permita gobernar a la lista más votada.

Aunque en un principio el jefe del Ejecutivo ha respondido que le parece bien, a renglón seguido ha precisado su opinión al respecto.

«Dejar gobernar a alguien con ciento equis escaños, los que sean, se puede, pero es muy difícil», ha subrayado antes de asegurar que él va a mantener la misma idea de que haya un gran pacto con el PSOE y Ciudadanos porque permitiría abordar las reformas que cree que necesita España.

Rajoy ha expuesto que si los españoles le dan una mayoría amplia para gobernar, él lo intentará y, si no, reiterará su planteamiento de una gran coalición porque cree que no hacerlo sería «una auténtica insensatez».

Ante la cita con las urnas y en medio de una exposición inicial de carácter eminentemente económico, Rajoy ha asegurado que sólo perseverar en el modelo y la «fórmula» que ha puesto en marcha en los últimos años garantiza el «sueño» de España de formar parte del núcleo de países más avanzados de Europa y abrir un futuro de progreso y prosperidad.

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En esa línea, ha explicado que todo lo conseguido por España en los últimos años puede cambiar si se abandonan las directrices que han permitido sentar las bases de un modelo económico equilibrado y sólido y se cae en el «error monumental» de dar marcha atrás en las reformas.

En este ámbito económico, ha augurado que el crecimiento económico de España en el primer semestre será superior que el registrado en el mismo periodo de 2015.

Además, ha mostrado su convencimiento de que «no va a haber ninguna suerte de multa» a España por parte de la Comisión Europea por no cumplir los objetivos de déficit.

El jefe del Gobierno ha dedicado parte de su intervención a culpar a las alcaldesas de Barcelona, Ada Colau, y de Madrid, Manuela Carmena, de hacer «muchísimo daño a la economía» con algunas de las decisiones que han tomado en sus respectivas ciudades.

También ha habido referencias a la corrupción, y el presidente ha reconocido que ha sido «una pesadilla» para el PP, para muchos otros partidos, para las instituciones y para todos los ciudadanos, pero ha defendido las medidas que se han ido poniendo en marcha durante los últimos años para hacerle frente.

Rajoy ha sido preguntado por los empresarios por su opinión ante quienes consideran necesaria una renovación en los partidos con gente más joven.

«Decir que no puede dedicarse a la política quien ha nacido antes de la Constitución es una broma», ha subrayado antes de recordar la renovación en el PP con personas como Soraya Sáenz de Santamaría (de quien ha destacado su inteligencia, capacidad y fidelidad al servicio de los ciudadanos), María Dolores de Cospedal o los últimos vicesecretarios nombrados en su partido.

Respecto a la situación en Cataluña, Rajoy ha vuelto a garantizar al presidente catalán, Carles Puigdemont, que su disposición al diálogo «es total», pero al mismo tiempo le ha advertido de que no permitirá «un referéndum que liquide la soberanía nacional».