Rajoy ya avanzó el pasado sábado, tras su investidura, que sería este jueves por la tarde cuando desvelaría quiénes se sentarán con él en el nuevo Consejo de Ministros y la estructura del mismo.
Una vez que se sepa el Gobierno, los ministros jurarán o prometerán este viernes su cargo ante el Rey, mantendrán la primera reunión del Consejo y protagonizarán el intercambio de carteras en aquellos departamentos en los que haya relevo.
Rajoy tiene toda la mañana de este jueves para concretar algún fleco que le pueda quedar pendiente y, si no lo ha hecho aún, contactar con la totalidad de integrantes de su Gabinete.
El Rey tenía ya despejada su agenda tanto para la jornada de este jueves como la de este viernes a la espera de fijar cuándo recibiría al presidente del Gobierno y a qué hora se convocará el acto de acatamiento de la Constitución por parte de los nuevos ministros.
En principio, no se espera que en la reunión del Consejo se vayan a tomar decisiones de calado, más allá de algún nombramiento, debido al escaso tiempo que transcurrirá desde la toma de posesión.
En principio, será en la reunión del viernes 11 de noviembre cuando empezarían a adoptarse iniciativas de relevancia.
9 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Sé fuerte, Cospe, sé fuerte... (en diferit)
Son las 18.27 del jueves y aún no ha parido el embarazo del Sr. Rajoy, es como una tomadura de pelo, pero, ya estamos acostumbrados.
acojonadíshimo eshtoy . . . . .
¿Ya ha acabado "La escopeta nacional"?
Se le ha ido la prisa por formar gobierno...lo suyo no es correr jojojo...
... supongo que serán de los que se arrodillan para jurar frente a un crucifijo y una biblia, como en el tardofranquismo... va a ser verdad aquello de que vivimos en un bucle y el pasado se repite una y otra vez...
Bauzà de ministre no ... Bauzà de ministre no ... Bauzà de ministre no ... Bauzà de ministre no ... Bauzà de ministre no ... Bauzà de ministre no ...
Miedo me dan....
Estoy que no vivo, de impaciencia, estamos al borde de un ataque de nirvis