El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha dicho que el debate sobre un posible adelantamiento del referéndum soberanista en Cataluña no tiene ningún sentido y ha instado a la Generalitat a resolver los problemas de los ciudadanos sin someterles a «tensiones absolutamente innecesarias».

Méndez de Vigo ha subrayado en un desayuno informativo que los políticos están para solucionar problemas y no para crearlos motivados por «el juego político, la falta de mayoría, la necesidad de unos o la radicalidad de otros».

Ha señalado que el Gobierno ha sido «meridianamente claro» respecto al referéndum «ilegal», cuyas consecuencias serían las mismas que las que tuvo la consulta del 9N para quienes apuestan por la escisión. «Ninguna», ha recalcado.

Por eso, ha hecho un llamamiento «a la tranquilidad, a ver las cosas con normalidad, a ocuparse de los problemas de la gente y a no crear problemas».

En este sentido, ha añadido que «instar a una consulta ilegal ahora es crear un problema a la gente» y ha reiterado que, frente a esa actitud, el Gobierno insistirá en explicar a los ciudadanos que hacer una consulta ilegal «no lleva a ninguna parte».

«Hacer pedagogía sobre las cosas (...). Esa labor es muy importante y es lo que va a hacer el Gobierno», ha defendido el portavoz del Ejecutivo.

Respecto a la investigación de la Fiscalía por las declaraciones del juez Santiago Vidal sobre que la Generalitat dispone de los datos fiscales de los catalanes, ha apuntado que espera que se clarifique la situación y se diga si lo que ha dicho el exsenador «es cierto o no».