Muchas personas tienen miedo a donar órganos en vivo, ya que muchas empresas despiden por ello. | Redacción Digital

El responsable de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, ha pedido al Gobierno que equipare la situación de los donantes de vivo de riñón y de hígado a las de las embarazadas en lo que se refiere a las posibilidades de facilitarles una baja laboral.

Según Matesanz, algunos empresarios ponen dificultades a estos donantes al considerar que esta intervención es voluntaria, algo que desde la ONT se considera claramente «injusto», como el caso de un padre que fue despedido tras donar parte de su hígado a su hija.

Noticias relacionadas

El 52% de los trasplantes hepáticos infantiles se realizan con donante en vivo, principalmente de los padres. Y en el 70% de los casos, los progenitores tienen problemas laborales a consecuencia de la intervención.

Estos datos los facilita la Asociación Española de Ayuda a Niños con Enfermedades Hepáticas y Trasplantados Hepáticos (HEPA), que acaba de presentar la campaña 'Que salvar una vida no nos deje sin trabajo', a través de change.org para impulsar una proposición no de ley que permita crear una figura de protección para el donante vivo.

Matesanz ha pedido en el Congreso de los Diputados, alegando, además que estos problemas influyen negativamente en la donación en vivo. Muchos familiares compatibles se niegan a dar un órgano, no por el hecho de hacerlo, sino porque se arriesgan a quedarse sin trabajo.