Fotografía facilitada por Sociedad Civil Catalana (SCC) de los siete muñecos boca abajo, algunos de ellos con logos de Cs, PSC y PP, que unos desconocidos han colgado de un puente de la C-17 a la altura de Malla (Barcelona). | @SOCIETATCC

Unos desconocidos han colgado en un puente de la C-17 a la altura de Malla (Barcelona) siete muñecos boca abajo, algunos de ellos con logotipos de Cs, PSC y PP, junto a una pintada que pide la libertad de los «presos políticos», hecho por el que los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación.

Según han informado a Efe fuentes policiales, una persona ha llamado a los Mossos d'Esquadra hacia las nueve de la mañana advirtiendo de que había siete muñecos blancos, colgados boca abajo, en un puente situado en la C-17.

Agentes de los Mossos d'Esquadra se han desplazado al lugar y han descolgado los muñecos, vestidos con una bolsa blanca, en el que en tres de ellos se aprecia el logo de los tres partidos que dieron en Cataluña apoyo a la aplicación del artículo 155 de la Constitución: PP, PSC y Ciudadanos.

Los Mossos han abierto una investigación para tratar de identificar a las personas que han colgado estos muñecos en el puente, donde también se observa una pintada en la que se pide la libertad de los «presos políticos».

El secretario general del PP catalán, Santi Rodríguez, ha calificado de «absolutamente reprobable» esta acción, que a su juicio es «un ejemplo de todo lo que se debe intentar superar en el 21D» y la ha achacado a la «intolerancia alimentada por los partidos independentistas y por algunos de los exconsellers que declaran ante el Tribunal Supremo», añadiendo que presentarían una denuncia.

Por su parte, la portavoz socialista en el Congreso, Margarita Robles, ha confiado en que los Mossos, que han demostrado «profesionalidad» en muchas ocasiones, identifiquen a las personas responsables de la acción, afirmando que «ninguna campaña electoral» permite «amenazas ni descalificaciones que exceden la crítica razonable», y ha recordado que el PSOE ha condenado los tuits vejatorios dirigidos recientemente a la dirigente catalana del PP Alicia Sánchez Camacho.

Otra de las voces en relación a este asunto ha sido la de la vicepresidenta cuarta del Congreso y diputada de Unidos Podemos, Gloria Elizo, quien ha tachado de «deleznable» la aparición de los muñecos, y lo ha achacado al «descrédito» de la clase política.

Para Elizo, este tipo de «agresiones», a la que ha sumado las amenazas e insultos sufridos esta semana en Twitter por su compañera popular de Mesa Sánchez Camacho, son consecuencia del periodo de crisis democrática que vive España.

«Cada uno de los conflictos políticos que han afectado a este país tienen que ver precisamente con el desdoro de la clase política y la falta de respeto a la diferencia política».