Además de castigar con dureza el uso del teléfono móvil en los coches, Tráfico también ha restringido la velocidad de circulación. | Pixabay

A partir de este martes, día 29 de enero de 2019, hablar por el teléfono móvil mientras se conduce supondrá una sanción de 500 euros y la retirada de 6 puntos de carnet. Así lo explica Antoni Cànovas, experto en seguridad vial y expresidente de las autoescuelas de Balears. Queda, así, equiparada la sanción a conducir bajo los efectos del alcohol o de drogas, entre otras.

Este cambio afecta, no obstante, sólo al uso del móvil. La manipulación de cualquier otro dispositivo electrónico, como puede ser el GPS, se mantiene 3 puntos y 200 euros. «Los datos son muy preocupantes y debemos hacer una seria reflexión. Uno de cada tres conductores fallecidos en las carreteras de España dio alcoholemia o en consumo de drogas. Especialmente, estas cifras son más significativas entre los jóvenes, concretamente en edades comprendidas entre los 25 y los 34 años, cuyos fallecidos en 2018 fueron de 293 frente a los 223 del año anterior», señala Cànovas.

El experto en seguridad vial y presentador de espacios de divulgación valora de forma «muy positiva» las nuevas medidas impuestas por el director general de Tráfico, Pere Navarro. «Aunque parezca mentira, detrás de las cifras de fallecidos en carretera, muy por encima del aumento de desplazamientos, el estado de las diferentes vías, tanto de población como de carreteras, o el envejecimiento de los turismos, están las distracciones provocadas por los móviles. Hoy en día, basta fijarse un poco para ver la cantidad de gente que conduce y envía mensajes», concluye.

La reducción de velocidad a 90 kilómetros hora en las carreteras convencionales también entra en vigor mañana. Este decreto que el BOE publicó el 29 de diciembre, fue aprobado por el Gobierno a propuesta de la Dirección General de Tráfico. Su objetivo es poner freno a las muertes que el exceso de velocidad provoca en las carreteras convencionales, donde cada año mil personas pierden la vida en accidentes. Sin embargo, y previsiblemente, servirá también para que Tráfico obtenga más ingresos por sanciones.